LAS VEGAS.- El filipino Manny Pacquiao derribó a Shane Mosley en el tercer asalto, después lo persiguió durante el resto de la noche.
No pudo hacer mucho en contra de un envejecido boxeador que en ocasiones parecía buscar solamente sobrevivir.
Pacquiao obtuvo el sábado una clara victoria por decisión unánime sobre "Sugar" Shane Mosley para retener su título mundial welter de la OMB en su 14to triunfo consecutivo en el MGM Grand Garden de Las Vegas, en una pelea que fue duramente abucheada en los últimos episodios debido a que Mosley se rehusó a intercambiar golpes.
Pacquiao (54-3-2) no logró el nocaut que deseaba, pero el legislador filipino mantuvo su lugar como el mejor boxeador libra por libra al golpear metódicamente a Mosley (46-7-1).
"No fue mi mejor actuación", dijo Pacquiao. "Hice mi mejor esfuerzo. No esperaba este resultado".
El filipino ganó todos los rounds en las tarjetas de dos de los jueces para extender una impresionante racha que lo ha convertido en uno de los boxeadores más fascinantes de la historia.
El campeón de ocho divisiones derribó a Mosley con una combinación de derecha e izquierda en el tercer asalto, apenas la tercera vez que el estadounidense visita la lona en sus 18 años de carrera.
Pacquiao también se ganó el sincero respeto de un retador veterano que se ha enfrentado a varios de los mejores boxeadores del mundo.
"Enfrenté al mejor peleador del mundo", aseguró Mosley. "Tiene una potencia excepcional, una potencia que nunca antes había recibido en un golpe".
A Mosley, de 39 años, se le adjudicó una caída de Pacquiao en el 10mo round cuando parecía haber empujado al filipino mientras el campeón lanzaba un golpe.
Para Mosley, el combate fue sorprendentemente similar al que sostuvo hace un año frente a Floyd Mayweather Jr. — excepto que en esta ocasión, Mosley ni siquiera pudo conectar un golpe sólido como lo hizo en contra de Mayweather.