Julio Baptista sigue en estado de gracia.
EFE
SANTIAGO.- Todo es felicidad en Málaga. El cuadro de Manuel Pellegrini consiguió su quinta victoria consecutiva en la Liga, hecho que se logra por primera vez en la historia del club. Además están prácticamente salvados del descenso.
La hazaña la consiguieron ante el Sporting de Gijón en La Rosaleda al ganar por un claro 2-0, en un partido que lo dominó de principio a fin, y únicamente se vio empañado por la lesión de José Salomón Rondón.
La cuenta la abrió a los 9 minutos, para variar, el brasileño Julio Baptista, quien ensayó un perfecta tijera en el área para derrotar al portero Juan Pablo.
El tanto definitivo lo anotó a los 57' Eliseu al encarar sólo al arquero del Gijón y definirle al primer palo. Ahí, el partido se calmó, Pellegrini metió cambios y el estadio fue una fiesta.
Con este triunfo el club del Ingeniero trepa hasta la décima posición con 45 puntos y, aunque matemáticamente no está salvado del descenso, podrán respirar mucho más tranquilos.
De aquí en adelante el Málaga deberá visitar al Athletic de Bilbao y recibir al Barcelona en la última jornada. Por una sucesión de cruces entre los equipos de abajo, es muy difícil que el equipo del DT nacional pierda la categoría.