El ex técnico de la U, Hector Pinto, junto al meta Johnny Herrera fueron protagonistas de la final ante la UC el 2005.
El MercurioSANTIAGO.- Martes 22 de diciembre de 2005, arco sur del Estadio Nacional. El atacante de Universidad Católica Jorge "Polo" Quinteros toma la pelota y la coloca en el punto penal. Mira al arco y Johnny Herrera espera el remate...Lanza el argentino y la bola cruza la línea de sentencia. La UC se corona campeona del Torneo de Clausura y comienza la celebración en Ñuñoa, mientras su archirrival se retira de la cancha bajo una fuerte ovación de "Los de Abajo".
Aunque ya han pasado cerca de seis años de esa definición, la misma que se volverá a repetir esta semana, el técnico que dirigía a los azules en ese momento, Héctor Pinto, aún no olvida esa noche que tuvo muy cerca al cuadro laico de conquistar un nueva corona para su vitrina.
"Fue una partido muy disputado. Recuerdo que (Diego) Rivarola tuvo una oportunidad en los últimos minutos y por ahí lo podíamos haber ganado, pero se perdió. La UC hizo su juego, nos complicó y llegamos a los penales. Y bueno, pasó lo que todos saben", recordó Pinto a Emol, quien hace dos años es el jefe de las divisiones inferiores de Cruz Azul de México.
Y sigue: "Llegamos a esa final en un muy buen pie. Fuimos partido a partido subiendo nuestro nivel, pero en ese tipo de encuentros eso no sirve mucho pues siempre hay circunstancia que te pueden condicionar todo".
El ex DT del elenco laico reconoce que no fue fácil aceptar que se les escapó un nuevo título. "Fue una de las tristezas más grande que he pasado. Perder por penales es muy duro, además con un estadio completamente lleno".
Pero pese a la derrota Pinto no siente que quedó en deuda con la hinchada azul. "Nunca se me pasó por la cabeza que había hecho algo malo. Todo lo contrario, la gente entendió que los jugadores se entregaron al máximo, por eso la barra nunca nos reprochó. Hubo muchas personas que nos apoyaron a la salida del estadio".
De cara a la final del jueves y el domingo, Pinto asegura que "creo que vamos a ver dos partidos muy ajustados, no hay favorito. Ambos equipos llegan muy motivados, con un alto nivel futbolístico, pero quizás la U aparece con una pequeña ventaja por lo fácil que fue su paso ante O´Higgins, mientras que Católica tuvo algunos problemas con Calera...Pero te insisto puede pasar cualquier cosa, por eso no voy a dar un resultado".
Finalmente, no tiene problemas para señalar que tiene el corazón dividido. "Yo trabaje en Universidad Católica y tengo buenos recuerdos, la verdad que hoy soy 'Cruz Azul' (se ríe). Me gusta esta actividad y por eso espero que sea una gran final y que gane el fútbol".