AFP
MONTEVIDEO.- Aunque Peñarol no pudo ganar su sexta la Copa Libertadores, tras caer en la final frente a Santos en Brasil por 2-1, los seguidores del club uruguayo igual festejaron en el centro de la capital.
Centenares de personas que siguieron con emoción el partido, se lanzaron a las calles para resaltar la actuación del equipo, que terminó como subcampeón en el principal torneo de clubes del continente.
Los parciales aurinegros le reconocieron a los jugadores la entrega que mostraron en el estadio Pacaembú, especialmente cuando estaban perdiendo por dos goles.
Leo, mozo de un café céntrico, dijo, conformándose, "perdimos, pero entregamos todo. Es casi como un triunfo por lo que dieron los jugadores. Nunca se dieron por vencidos".
El partido de ida en Montevideo había terminado 0-0 hace una semana. La policía movilizó unos 300 uniformados, la mayoría de grupos especializados para prevenir disturbios.
"Buscamos que quienes salgan a manifestarse lo puedan hacer en paz y también resguardar la propiedad privada, porque en estas ocasiones además de festejar, algunos cometen daños y delitos", dijo Juan C. Duré, jefe de relaciones públicas de la jefatura de policía.
Desde horas antes del encuentro se palpaba en cualquier rincón del Uruguay la expectativa por esta final de la Libertadores, entre dos equipos que ganaron las primeras cuatro ediciones: en 1960 y 1961 Peñarol, y en 1962-63 el Santos del mítico rey Pelé, por lo cual la rivalidad, aún por encima de los años pasados, estaba latente.