EFE
Claudio Bravo: Más allá de algunos titubeos el capitán de Chile estuvo sólido. Cortó centros, no dio rebotes y le tapó una muy buena a Luis Suárez. En el gol de Pereira no tuvo nada que hacer, el uruguayo quedó sólo a unos pocos metros del arco.
Pablo Contreras: Demostró por qué es el jugador más experimentado de la selección chilena. No se lo pasaron nunca. Ni Suárez ni Forlán pudieron con él. Aparte de su regularidad sacó una pelota en la línea y ganó cabezazos a jugadores que le sacaban una cabeza, como Coates.
Waldo Ponce: Mantuvo el rendimiento del partido ante México: jugó a un gran nivel. Llegó a las coberturas cuando los uruguayos lanzaban el pelotazo. El único punto bajo fue que perdió la marca de Pereira en el gol por salir a ayudar a Isla en la marca.
Gonzalo Jara: Volvió a ser el más bajo de la zaga chilena. Cometió errores infantiles en algunos pases que pudieron costar caro y se vio sobrepasado un par de veces por su banda. Salió reemplazado por Valdivia, y eso, fue lo mejor que le pudo pasar al equipo.
Mauricio Isla: Estuvo en su nivel. Uno que viene mostrando hace ya varios partidos. Pasó cuando tuvo que pasar y contuvo a Cáceres que no pasó ni una sola vez. Además, de suerte, tuvo la apertura de la cuenta tras un rebote que de 30 metros dio en el travesaño. Sobre el final del partido pudo ganarlo con un remate violento de 30 metros.
Gary Medel: El más solidario de la selección chilena. Cuando Uruguay apretó a la "Roja", el volante del Sevilla se metió entre los centrales para colaborar con la marca. También quitó mucho en el medio y no dudó en ir al ataque cuando se le abrían en el medio. Simplemente un todoterreno.
Arturo Vidal: Se acordó que Muslera se "comió" un par de goles en el amistoso de noviembre de 2010 y probó constantemente de distancia, lamentablemente sin éxito. Al igual que ante México ayudó bastante en la gestación de fútbol, con Medel bastaba para contener. Bien Arturo, que se equivocó mucho menos que el martes en San Juan.
Jean Beausejour: Fue el más resistido por la hinchada en el Malvinas Argentinas, pero ojo: durante el primer tiempo se preocupó de que Edinson Cavani no pasara por su banda, en eso se le fueron 45 minutos. Cuando salió el del Napoli, Beausejour tuvo mucho más espacio e incluso habilitó de gran forma a Sánchez en el único gol de Chile. Cumple a pesar de las críticas.
Luis Jiménez: Su rendimiento sorprendió a muchos. En los primeros minutos, cuando Chile no encontraba su juego por el pressing de Uruguay, Jiménez logró calmar al equipo y poner la pelota sobre el piso. Aguantó los 90 minutos a un nivel sobre el promedio. A lo mejor le resta puntos las dos situaciones de goles que no pudo concretar.
Alexis Sánchez: Le costó 25 minutos subirse a la moto, pero después de eso nadie lo pudo bajar. Se sacó a cuanto uruguayo encontró en el camino. Generó faltas cerca del área, le dio descanso a sus compañeros al aguantar la pelota ante dos o tres marcadores. Su gol -que a muchos les recordó el de Ronaldo ante Turquía en el Mundial 2002- es casi consagratorio, en un momento en que todo el planeta fútbol tiene sus ojos sobre el.
Humberto Suazo: El "Chupete" peleó pero simplemente no le salió ninguna. Se vio lento, a otro ritmo que su equipo. Siempre le faltó aceleración para llevarse a los defensas charrúas. Su cambio por Esteban Paredes debió ser varios minutos antes, incluso en el entretiempo. No tuvo ocasiones de gol y, eso, en un jugador como Suazo dice mucho.
Jorge Valdivia: Los adjetivos sobran al describir el ingreso de Valdivia. Fenómeno se queda corto. Primera pelota que tocó generó el gol de Alexis. Luego todos los pases que dio tenían intención de gol. Sobre el final le hicieron dos faltas al borde del área que pudieron significar el triunfo. Si mejora físicamente está de más decir que debe ser el 10 de la "Roja".
Esteban Paredes: Entró mejor que Suazo. Tuvo dos opciones y, como entró fresco, fue un problema para Lugano y Coates, que a esa altura ya boqueaban.
Carlos Carmona: Entregó el equilibrio necesario para que la selección aguantara un empate que no le disgustaba en lo absoluto. Si Borghi quiere retrasar a Vidal, en Carmona tiene al segundo contención.
