Será compañero de Pizarro en la capital italiana.
EFE
BARCELONA.- El FC Barcelona traspasó al delantero Bojan Krkic al AS Roma a cambio de doce millones de euros, con una opción de compra cifrada en trece millones al término de la temporada 2012-13.
Según anunció el club catalán, el costo de la operación es de doce millones y en la misma figura la citada opción, tal y como había impuesto el Barcelona como condición para traspasar al delantero.
Esto significa que el recientemente contratado chileno Alexis Sánchez será la primera opción de cambio para Lionel Messi, David Villa y Pedro Rodríguez en la ofensiva del elenco blaugrana.
La opción de recuperar al jugador puede ser bloqueada por el cuadro romano, aunque en este caso "el costo total" del traspaso quedaría cifrado en cuarenta millones de euros.
El acuerdo entre ambos clubes ya se había cerrado desde hace días, como también el de Bojan con el Roma, aunque no se había hecho oficial hasta que el Barcelona cerró la contratación del chileno Sánchez.
La falta de oportunidades por parte de Pep Guardiola, quien apenas ha confiado en el prometedor delantero, a diferencia de su predecesor en el cargo, Frank Rijkaard, han desembocado en la salida de Bojan.
El delantero, que cumplirá 21 años el próximo 28 de agosto, batió récords de precocidad en el Barça, puesto que debutó con el primer equipo con 16 años (abril de 2007), en un partido amistoso ante el Al-Ahly egipcio, donde marcó un tanto en su estreno.
En la temporada siguiente, Rijkaard lo subió al primer equipo. En septiembre de 2007 entró en su primera convocatoria oficial y se convirtió en el tercer jugador más joven en debutar con el equipo azulgrana.
A pesar de lo complicado de encajar en un equipo repleto de estrellas, Bojan Krkic cumplió con las expectativas y consiguió doce goles en su primera temporada. En la siguiente marcó diez, repitió doce goles en la 2009-2010 y únicamente seis en la última, donde apenas contó para el técnico. Bojan quería tener más presencia y Guardiola no podía darle más minutos.
Por eso, el fichaje de Luis Enrique Martínez como nuevo entrenador del AS Roma le abrió los ojos. Él solicitó a su nuevo equipo el fichaje del canterano barcelonista y sólo había un inconveniente: la inclusión de una cláusula donde pueden recuperar al jugador por parte del cuadro azulgrana al cabo de dos temporadas.