Real Madrid apabulló sin piedad a un débil Rayo Vallecano

SANTIAGO.- El Real Madrid venía de una derrota y un empate en la liga, por eso el partido de hoy era importante para levantar el ánimo de los “merengues”. El equipo de José Mourinho no tuvo piedad y goleó por 6-2 –y con 10 jugadores- a un humilde Rayo Vallecano.

Pero en un inicio parecía que la pesadilla continuaba. Los madridistas se colocaron en una inesperada desventaja luego del gol de Michu a los 22 segundos. De ahí los locales tuvieron una media hora de buscar, pero no encontrar.

No fue hasta el minuto 38 cuando un inspiradísimo Cristiano Ronaldo marcó el primero de sus tres goles en el partido, luego de gran pase de Kaká. Los dos siguientes fueron a los 50 y 83 minutos de penal.

El segundo tanto de los dueños de casa apareció justo a los 45 minutos, cuando Xabi Alonso lanzó un centro al área, Sergio Ramos, que estaba en un fuera de juego ignorado por el árbitro José Paradas Romero, se anticipó a Dani y asistió a Higuaín para que el argentino definiera con la meta vacía. El gol del "Pipita" significó un golpe letal para el Rayo.

El conjunto de Mourinho llegó con lo justo al descanso en ventaja y luego sentenció la historia en el complemento mediante su arma más letal: el contraataque.

Ya en el segundo tiempo, el Real Madrid retrasó sus líneas y sepultó las esperanzas de su rival mediante contraataques y penales .Cristiano anotó su primer penal del duelo, después de una falta sobre Kaká en el área.

Luego, el Rayo descontaría con otro gol de Michu y Angel Di María sería expulsado por tocar la pelota con la mano y recibir su segunda tarjeta amarilla. El juvenil defensor Varane se sumó a la fiesta y convirtió su primer gol en el Real Madrid con una especie de acrobacia al conectar un tiro de esquina desde la derecha.

Mientras que Benzema, ingresado desde la banca, concretaría una contra letal, tras la asistencia de Ozil. Sobre el final, Cristiano fue derribado por Dani en el área y selló la historia con su segundo gol de penal y tercero en el partido.

El portugués se consolidó como el máximo anotador del torneo, con siete tantos.