Messi y su Balón de Oro.
AFP
ZÚRICH.- El argentino Lionel Messi, que el lunes ganó su tercer Balón de Oro consecutivo, superó una nueva etapa en su trayectoria meteórica con el Barcelona y ya forma parte de los grandes del fútbol mundial con sólo 24 años y una carrera que todavía puede dar mucho de sí.
El delantero del Barça hizo historia con un tercer galardón consecutivo, por el que competía con el portugués Cristiano Ronaldo (Real Madrid) y con su compañero de equipo español Xavi, e igualó el récord que tenía hasta ahora en solitario el francés Michel Platini.
"El Balón de Oro es algo subjetivo. Habérselo dado a un muchacho como Messi es lo más lógico, porque ha hecho cosas maravillosas. Está ayudado por un equipo excepcional y es formidable que pueda tener tres a los 24 años", dijo Platini, el actual presidente de la Unión Europea de Fútbol (UEFA).
Si ya nadie cuestiona que el jugador de Rosario es uno de los grandes del fútbol actual, la pregunta que todos los expertos se hacen es saber hasta dónde puede llegar y si 'Leo' será un digno sucesor de mitos como Diego Maradona o el brasileño Pelé.
"Queda mucho Messi", dijo el presidente del Barcelona, Sandro Rosell, el lunes en el Palacio de Congresos de Zúrich, en una noche en que el fútbol de su club también fue recompensado con el premio al mejor entrenador para Josep Guardiola y la presencia de cinco de sus jugadores (Xavi, Gerard Piqué, Andrés Iniesta, Messi y Dani Alves) en el 'once ideal' del año.
"Messi será el que más Balones de Oro tendrá en la historia. Probablemente ganará cinco, seis o siete Balones de Oro, es incomparable, juega otra liga", asegura Johan Cruyff, que no ve techo en los logros del argentino.
El holandés, ex jugador y entrenador del Barça, es junto a Messi, Platini y su compatriota Marco Van Basten uno de los cuatro únicos jugadores de la historia que tienen tres Balones de Oro.
Pero como recuerda Platini, Messi es un "diamante" que necesita las "perlas" de su equipo para ser el mejor del mundo, algo de lo que el jugador es consciente cuando repite sin cesar que no se ve en ningún otro equipo que no sea el Barcelona.
El premio al mejor jugador del planeta cierra para el argentino un año excepcional, en el que ganó cinco títulos con el Barcelona, incluyendo la Liga española, la Liga de Campeones y el Mundial de Clubes.
Se trata también de la victoria de un talento precoz, que llegó al Barcelona con 13 años y tiene ahora 24, la misma edad que tenían Cruyff y Van Basten cuando lograron el primero y cuatro años menos de los que tenía Platini cuando se lo llevó por primera vez, en 1983.
Ahora la gran asignatura pendiente de Messi será la selección argentina, con la que nunca ha conseguido brillar, tampoco cuando la dirigía Maradona en el Mundial-2010 de Sudáfrica.
"Hoy por hoy la realidad es que estamos muy lejos de ser la mejor selección del mundo, tenemos a muchas otras selecciones por delante, pero tenemos la ilusión de jugar de la mejor manera en el próximo Mundial (en Brasil)", reconoció el lunes en Zúrich.
Habrá que esperar hasta entonces para ver si Messi se convierte o no en un nuevo 'Pibe de Oro'.
