El serbio admitió que ''se necesitan cambios'' en el circuito.
EFEMELBOURNE.- Después de los primeros días en que rondaran por Melbourne Park rumores sobre una posible huelga de los tenistas masculinos, descontentos con el calendario, se esperaban las declaraciones del tenista serbio, Novak Djokovic, actual número uno del mundo.
"Está claro que hay muchos jugadores de tenis masculino que se quejan de la agenda y la temporada", sostuvo Djokovic evitando profundizar más en la polémica que tuvo por estos días de protagonistas a Nadal y Federer.
El jugador mantuvo su postura de no ahondar en los rumores, pero mando una clara señal a los organizadores de la ATP.
"No tengo mucho más que decir. Basta con mirar las lesiones que tenemos, especialmente los jugadores más importantes, incluyéndome yo, que lo viví a finales del año pasado. Está claro que necesitamos cambios. Pero prefiero hablar los detalles sobre el tema a puerta cerrada", agregó.
La pólemica continúa, debido a que los jugadores que se sitúan en los puestos bajos del ranking, se quejaron sobre la distribución de los premios en dinero en torneos del Grand Slam y de la obligatoriedad de los certámenes de la ATP.
Además, advirtieron que boicotearán futuros eventos si no se tienen en cuenta sus demandas sobre una mayor división de los ingresos.
Alrededor de Melbourne Park han rondado ideas de creación de un sindicato de jugadores, pero Djokovic lanzó una advertencia. "Es una incertidumbre porque hay muchos jugadores diferentes con muchas opiniones diferentes", indicó el serbio.
"Así que se tendrá que discutir más y ver cuál es la mejor opción para nosotros", añadió.
El tenista serbio inició su defensa del título en el Abierto de Australia con una contundente victoria sobre el italiano Paolo Lorenzi por parciales de 6-2, 6-0 y 6-0.