Trabaja duro para recuperar nivel
Denis Isla, El MercurioVIÑA DEL MAR.- Nicolás Massú lucha y lucha, sigue peleando, con la ilusión viva del regreso al “primer nivel del tenis”, como él mismo lo considera. “Nadie me puede negar el deseo de volver arriba”, indicó muy animado tras concretar un distendido entrenamiento con Fernando González esta mañana en el Court Central del Club Naval de Campo Las Salinas, previo a su debut en el ATP de Viña del Mar.
Tras años de frustración, jugando torneos menores y clasificaciones de eventos grandes, alejados del nivel que supo tener en sus mejores días, el viñamarino se siente vivo en casa. Es su lugar, el hábitat donde creció y en el cual edificó sus mejores historias y así lo siente con nostalgia.
“Soy el chileno que más jugué acá (NdlaR: desde 1997 sólo se perdió el torneo en 2005 por una operación) y los recuerdos de aquí son los mejores de mi carrera”, recuerda el ex nueve del mundo, que fue finalista del torneo en 2006 y 2007.
Aunque muchos lo dan por retirado, Massú sigue intentando, corrigiendo errores como si fuera un juvenil, preguntándole a su entrenador Andrés Schneiter qué esta bien y lo que hace mal dentro de la cancha, respuestas que no siempre encuentra, pero que no lo desanima del todo como ocurría antes cuando se mostraba muy irritado en caso de cometer muchos fallos.
Incluso se da el tiempo de bromear, de hacerle burlas a su coach y de emitir juicios al aire, buscando algún motivo de apoyo cuando las cosas no le salen como él quiere. Un hecho elogiable para alguien que no puede recuperar la forma que supo tener en el pasado, cuando muchos ya habrían tirado la toalla y pensarían en hacer otra cosa.
“Entrené tres semanas en Buenos Aires para preparar este torneo y lo que viene. Quiero empezar con el pie derecho acá en Viña. Es mi ciudad, donde protagonicé muchas batallas y partidos intensos, cuando me acuerdo de eso me siento muy bien y motivado de reeditar esos partidos”, comenta con mucha ilusión.
A la espera de su rival, proveniente de la clasificación, el cual tendrá mucho ritmo de competencia, Massú pretende cambiar una historia que a los 32 años lo tiene dentro de los más veteranos del circuito, pero con la ilusión y ganas intactas de volver al primer mundo del circuito de la ATP.