Los 11 títulos ATP de Fernando González en el circuito profesional

SANTIAGO.- 11 fueron los títulos que consiguió Fernando González como profesional durante su carrera.

Orlando 2000: Nadie lo esperaba

Fernando González estaba ubicado en el puesto 352° ATP en mayo del 2000. Era un jugador con un buen pasado en juniors, pero que no lograba cuajar ese potencial en profesionales. En el torneo de Orlando, sobre arcilla verde en Estados Unidos, entró a la clasificación con lo justo, la cual pasó e ingresó al cuadro principal.

Poco a poco fue derribando rivales. Primero al estadounidense Cecil Mamiit, luego al francés Antony Dupuis y en cuartos de final al tailandés Paradorn Srichaphan, sin perder un set.

En semifinales dio cuenta del argentino Martín Rodríguez (quien años más tarde fue su entrenador) en tres sets, para alcanzar la primera final de su carrera a los 20 años.

Fue una definición especial, porque su rival fue nada más y nada menos que Nicolás Massú, su eterno amigo y compañero, que en ese momento recién se instalaba en el Top 100. González aprovechó su envión y barrió con el viñamarino por 6-2 y 6-3, sumando su primer título ATP.

Viña del Mar 2002: Graduación en casa

Tras un 2001 para el olvido, González comenzó el 2002 a tambor batiente, alcanzando octavos de final en el Abierto de Australia, bajo la conducción de Horacio de la Peña, metiéndose por primera vez dentro de los 100 mejores del mundo.

Ese buen momento lo llevó a la arcilla de Viña del Mar, donde el "Bombardero" comenzó a edificar el año de su explosión en el circuito. En su estreno barrió al argentino Agustín Calleri, luego dejó en el camino al español Félix Mantilla, al trasandino José Acasuso y el francés Nicolas Coutelot sin perder un set.

En la final se midió con Nicolás Lapentti, primer favorito del torneo y 19 del planeta en ese instante. González, en un extenso duelo, derrotó al ecuatoriano por 6-3, 6-7 y 7-6, convirtiéndose en el primer tenista nacional en ganar el campeonato ATP de nuestro país.

Palermo 2002: Cambio de mando

González ya estaba dentro de los 30 mejores del mundo y asechaba a Marcelo Ríos por el número uno de Chile. Venía de alcanzar semifinales en el Masters Series de Cincinnati y cuartos de final en el US Open.

En la arcilla italiana de Palermo, el chileno demostró que había llegado para quedarse en la elite del tenis y no sólo conquistó el título, también superó en el escalafón mundial por primera vez a Ríos.

El croata Zeljko Krajan, los españoles Albert Montañés y Alberto Martín, el checo Bohdan Ulihrach y el argentino José Acasuso (en la final) fueron sus víctimas. De esta forma, el nacional quedó al borde del Top 20 y conquistó su tercera corona profesional.

Viña del Mar 2004: Derriba a una leyenda

Fernando González llegó a la arcilla viñamarina tras un pobre inicio de año. Eliminado en su estreno en Australia por el número uno Andy Roddick, fuera del Top 30 por primera vez en varios meses, necesitaba un gran resultado en la ciudad jardín para volver a recuperar su confianza.

Tras dejar en el camino al español Albert Montañés, a los nacionales Adrián García y Nicolás Massú, además del brasileño Flavio Saretta alcanzó la final ante una de las leyendas de los últimos años del tenis sudamericano: Gustavo "Guga" Kuerten.

El tres veces campeón de Roland Garros estaba aún vigente, dentro de los mejores 20 del planeta y con ganas de volver al Top 10, pero se encontró con un González que estaba en una de sus mejores semanas. Así, el chileno dio cuenta por 7-5 y 6-4 del oriundo de Florianópolis y se quedó con el cuarto título de su carrera.

Auckland 2005: Primero fuera de la arcilla

El inicio del 2005 fue el mejor para González. En el torneo de Auckland, el cual había ganado Marcelo Ríos en 1998, el "Bombardero" comenzó con la mejor manera, ganando el torneo sin perder un sólo set.

Dejó en el camino al estadounidense James Blake, el argentino Mariano Zabaleta, el norteamericano Robby Ginepri, al trasandino Juan Ignacio Chela y al belga Olivier Rochus (en la final).

Fue el quinto título del tenista de La Reina y primero en canchas rápidas, fue el comienzo de una temporada que lo vio levantar tres trofeos.

Amersfoort 2005: Sin oposición

En la arcilla holandesa, el "Bombardero" pasó por encima de todos sus rivales y otra vez conquistó un torneo sin ceder una sola manga.

González venía de llegar a cuartos de final en Wimbledon y trasladó ese nivel a los Países Bajos, para llevarse el sexto certamen de su carrera.

El belga Kristof Vliegen, el checo Robin Vik, el italiano Daniele Bracciali, el español David Sánchez y el argentino Agustín Calleri (en la final) fueron sus víctimas.

Basilea 2005: Primera corona bajo techo

En el epílogo del 2005, Fernando González alcanzó su primera corona en la superficie de carpeta bajo techo en el torneo suizo, el que seguramente es el torneo más importante que conquistó en su carrera.

Ya instalado dentro de los Top 15, el chileno demostró un gran nivel en Suiza y en las dos primeras fases dejó en el camino al italiano Andreas Seppi y el alemán Michael Berrer.

En cuartos de final eliminó a un prometedor joven de 18 años, por entonces llamado Andrew Murray de Escocia en tres sets, que luego se cambió su nombre a Andy y que hoy es una de las grandes figuras del circuito. En las semifinales superó sin problemas al eslovaco Dominik Hrbaty para instalarse en la definición.

El rival era el chipriota Marcos Baghdatis, quien asomaba recién en el circuito y fue un escollo muy difícil para González, que al final impuso su experiencia y derrotó al europeo por 6-7, 6-3, 7-5, 6-4.

Con este título, séptimo de su carrera, el chileno quedó como número 11 del planeta, el que en ese momento era el mejor que había conseguido.

Beijing 2007: Cortando una sequía

Si bien el período de 2006 y 2007 fue el mejor de su carrera, González no podía levantar títulos. Alcanzó muchas semifinales y final, pero en todas era derrotado por los mejores tres del planeta (Roger Federer, Rafael Nadal e Ivan Ljubicic), sin embargo en el abierto de China cortó la sequía de títulos que llevaba 22 meses.

En su camino a la corona en la pista dura asiática dejó al austriaco Alexander Peya, a Paul Capdeville, al coreano Hyung-Taik Lee, el croata Ivan Ljubicic y el español Tommy Robredo.

Sin jugar su mejor nivel, el chileno sólo ganó en sets consecutivos al jugador de Vitacura y su oficio le permitió superar al resto de sus oponentes en el tercer parcial. Así conquistó su octavo trofeo y el tercero en cancha dura.

Viña del Mar 2008: Sin final

González pasaba un mal momento. Lleno de dolores, se fue del Top 20 tras no poder defender los puntos de la final de Australia 2007 y llegaba a Viña buscando recuperar la gloria perdida.

Empezó bien, dejando en el camino otra vez a Capdeville y a los argentinos Diego Hartfield y Carlos Berlocq, alcanzando la semifinal sin problemas.

Allí lo esperaba una sorpresa, porque el uruguayo Pablo Cuevas, la gran sorpresa del torneo lo puso en serios aprietos. El charrúa incluso tuvo un match point en el segundo set, pero la experiencia de González prevaleció y lo derrotó por 6-7, 7-6 y 6-2.

Ese encuentro fue la final del torneo, porque el otro jugador que alcanzó la definición, el argentino Juan Mónaco, no podía presentarse debido a una lesión sufrida en un dobles que se disputó luego de su semifinal. Así, sin jugar, González se llevó su novena corona y tercera en casa.

Munich 2008: Último título en Europa

La irregularidad de González en 2008 era total. Los problemas físicos no lo dejaban tranquilos, sobre todo los dolores en su hombro y la rodilla, pero cuando no sentía molestias, el chileno podía demostrar su verdadero nivel.

Eso pasó en el abierto de Munich, disputado en arcilla, previo a Roland Garros. El tenista nacional consiguió su décimo trofeo de su carrera, no sin varios inconvenientes.

Sus rivales fueron el israelí Dudi Sela, el belga Kristof Vliegen, el ruso Marat Safin, el marroquí Younes El Aynaoui y el italiano Simone Bolelli (en la final), conquistando así el último trofeo en el continente europeo.

Viña del Mar 2009: Los demolió a todos

El último título de Fernando González llegó en el lugar donde mejor se sentía: en Viña del Mar.

Quedó libre en primera fase y luego pasó la aplanadora a sus cuatro oponentes en Las Salinas.

Primero fue el argentino Máximo González, luego su compatriota Juan Mónaco y en semifinales el uruguayo Pablo Cuevas.

En la definición dio cuenta por un contundente 6-1 y 6-3 al también trasandino José Acasuso, quedándose así con el undécimo certamen profesional de su palmares. Sin darse cuenta, este fue el último de su ilustre carrera.