La increíble historia del taiwanés que revivió a la NBA en sólo una semana

SANTIAGO.- Hace mucho tiempo que en Estados Unidos la aparición de un deportista no generaba tanta atención mediática. En este caso, la NBA que en los últimos años ha ido perdiendo popularidad debido al bajo nivel de los equipos y a la carencia de estrellas, necesitaba una estrella que captara la atención de la gente y eso ocurrió hace exactamente una semana atrás.

Su nombre es Jeremy Lin y viste los colores de los New York Knicks. Un jugador que de la noche a la mañana pasó de ser un completo desconocido a una superestrella de la liga, en una historia digna de una película de Hollywood.

El jugador nacido en California, de padres taiwaneses, saltó a la fama tras jugar por primera vez como titular ante Utah Jazz, pero fue contra Los Angeles Lakers el pasado viernes, cuando con una actuación descollante fue clave en el triunfo sobre Kobe Bryant y compañía en el mítico Madison Square Garden.

El "fenómeno" Lin que fue calificado de "Lin-sanity" en Estados Unidos (combinación del apellido del jugador y el término locura en inglés) ha renovado el interés por el básquetbol en Norteamérica. Una de las principales razones de esto es que sucedió justo en New York, uno de los mercados más importantes del país.

La oportunidad de tener una estrella en ascenso como Lin en los Knicks es una chance inmejorable para la liga, que hace muchos años ve cómo la franquicia de la "Gran Manzana" está de capa caída, y que esta temporada estuvo a punto de no disputarse por un largo paro laboral.

Dormía en el sillón de la casa un compañero de equipo

La noche anterior a que los sueños de Jeremy Lin se hicieran realidad, el joven dormía en un sillón. El base de los Knicks, Landry Fields, publicó una foto en Twitter la tarde del domingo, mostrando el lugar donde el nuevo fenómeno de la NBA se hospedaba cuando el elenco de New York no estaba de viaje.

"Señoras y señores, el único e inigualable sillón que hizo famoso por @JLin7!", comentó Fields. "Iniciamos el proceso de licitación", bromeó el jugador de segundo año en el certamen, al igual que Lin.

El base firmó con los Knicks el 27 de diciembre y por los constantes viajes del equipo nunca se pudo establecer en la "Gran Manzana", además hasta esa explosión no sabía si iba a seguir siendo parte del plantel.

Ahora que pasó a ser una superestrella y firmó un contrato por 800.000 dólares por esta temporada, tendrá tiempo y bastante dinero para trasladarse a otro lugar.

Estrella sin pasar por el "Draft"

"Lin-sanity" tiene otra particularidad, no fue elegido en el "Draft" universitario de la NBA, el lugar desde el cual sale la mayoría de las estrellas de la liga.

Tras no ser elegido en la lotería del 2010, firmó contrato como agente libre por Golden State Warriors, pero al poco tiempo fue cortado. Ya comenzada la actual campaña y debido a las lesiones de algunos compañeros logró firmar con los Knicks. Tras esperar su gran oportunidad, se lució en los últimos partidos y se convirtió en un fenómeno, respaldado por el coach Mike D'Antoni.

Obama, Time y Shaq

La aparición bombástica de Lin acaparó toda la atención de Estados Unidos, incluso de publicaciones no tan afines al deporte, como la revista Time que lo ubicó en la portada de la edición asiática de febrero.

Además, el mismo Presidente de Estados Unidos, Barack Obama, se interesó en la historia de Lin y desglosó algunos puntos clave de su actuación, como comentó su vocero.

Además de todo lo anterior, el nombre de Jeremy Lin ingresó a última hora dentro del All Star Weekend. Si bien, no pudo entrar al equipo de la Conferencia Este, la NBA lo incluyó dentro del juego entre novatos y jugadores de segundo año, que esta temporada tiene un nuevo formato.

Los equipos fueron elegidos en un "Draft" entre dos ex grandes estrellas de la liga: Shaquille O'Neal y Charles Barkley. El ex astro de Los Angeles Lakers eligió a Lin en su equipo junto a Blake Griffin y el español Ricky Rubio, entre otros.

Su proyección

Ahora viene el proceso de consolidación del californiano y donde debe reinventarse para evitar que su juego no sea presa fácil de las defensas rivales.

Además, su titularidad llega después de una serie de lesiones de un equipo que gira en torno al alero Carmelo Anthony, que es el "dueño" de casi todas las acciones principales de los Knicks. Sin "Melo", Lin tomó la batuta y se convirtió en un gran complemento para la otra estrella del equipo: el ala-pivot Amar'e Stoudemire.

El contrato de Lin finaliza al término de la temporada y los Knicks no tienen mucho espacio en el tope salarial debido a los millonarios contratos que le dieron a Anthony y Stoudemire, por lo que seguramente su continuidad va a provocar un gran debate en New York.

Sobre sus opciones de llevar a los Knicks al título, es muy temprano para saberlo. Además, en la Conferencia Este, el equipo de la "Gran Manzana" debe desplazar a dos colosos: Chicago Bulls y Miami Heat, fuertes candidatos a llevarse el trofeo de campeón.