Fue un partido parejo.
El Mercurio
SANTIAGO.- Universidad Católica y Unión Española igualaron este martes 1-1 en el Estadio Santa Laura por Copa Libertadores, en resultado que afianza a los de Independencia como punteros del grupo 3 del torneo y que deja al cuadro de Las Condes muy complicado, dado que acumula sólo tres unidades en igual cantidad de partidos disputados.
El primer tiempo fue de ida y vuelta, con muchas ocasiones de gol en ambos pórticos. Fue un partido digno de torneo internacional, porque tanto cruzados como hispanos tuvieron el arco del rival siempre entre ceja y ceja.
Y fueron los locales los que tuvieron las opciones más claras de abrir el marcador, pero los delanteros "rojos" estuvieron poco finos en la definición.
Así llegó el minuto 39 de partido, cuando un tiro libre desde el sector izquierdo del ataque precordillerano servido por Michael Ríos encontró la cabeza de Enzo Andía para batir la resistencia de Eduardo Lobos y decretar el 1-0 parcial.
Cinco minutos más tarde, a los 44', se instaló la polémica en el Estadio Santa Laura, porque le juez Claudio Puga pitó correctamente un penal que en primera instancia fue servido por Emanuel Herrera y su remate fue atajado por Cristopher Toselli. Celebraban todos los hinchas universitarios.
Sin embargo, el árbitro, acertado en su determinación, decidió que la pena máxima se repitiera por invasión de Marko Biskupovic antes de la ejecuión del delantero hispano, lo que provocó la molestia de los jugadores del cuadro visitante. En la reiteración nuevamente se paró Herrera ante el balón y nuevamente el portero cruzado contuvo el lanzamiento, aunque en el rebote el ex delantero de Deportes Concepción convirtió el 1-1.
Con el gol, Emanuel Herrera se instaló junto al delantero de Universidad de Chile Junior Fernandes, como uno de los dos goleadores de la Copa Libertadores, con cuatro conquistas cada uno.
El segundo tiempo, más bajo en intensidad que el primero, aunque con opciones en ambos arcos, fue el cuadro de Mario Lepe el que estuvo más cerca de convertir el segundo gol. La posesión de la pelota fue el mejor aliado de la UC, aunque casi siempre fallaron en la penúltima jugada, cuando los volantes debían habilitar a los atacantes.
Así llegó el final del partido, con una Unión Española que por lo ocurrido en la segunda parte, sacó barato el empate y con una UC que queda colgando de un hilo en el certamen internacional no por lo ocurrido en este partido, sino que por los emptaes como local ante Bolívar y Junior, algo que no se puede permitir a nivel continental.