Cazorla celebra su conquista en el Bernabéu.
ReutersSANTIAGO.- Loas y más loas se llevó el Málaga del chileno Manuel Pellegrini, tras el empate que le robó al real Madrid en el Santiago Bernabéu.
Los medios destacaron el juego del cuaxdro del chileno y sobre todo cómo el ingeniero paró el equipo en mediocampo.
"Pellegrini supo quitar brillantez al fútbol madridista en una nueva vuelta al que fue su estadio. Esta vez no pasó desapercibido. Pocos le agradecen el trabajo que dejó a José Mourinho porque no ganó títulos, pero muestra sus conocimientos con planteamientos como el que plasmó en el Bernabéu. Desdibujó a Khedira, tapó a Xabi Alonso y no hubo continuidad en el juego blanco", escribió La Opinión de Málaga.
El mismo medio habló del golazo de Cazorla. "Cuando parecía que el líder sufría para ganar un nuevo partido, apareció sobre la hora Cazorla para poner el broche a un gran partido en el que pudo ser su estadio. Una de esas faltas que ensaya en los entrenamientos de la selección con Casillas, se la coló por la escuadra para mantener en puestos 'Champions' al Málaga y devolver el pulso a la Liga".
El diario Málaga Hoy, en tanto, destacó los números del conjunto de Pellegrini. "El precioso empate de Cazorla no fue un milagro, fue el último de muchos. Excluyendo al Barça del juego, hablando en términos terrenales, nadie había robado un punto al Madrid en su fortaleza. Nadie le había arrebatado tanta posesión (51% blanquiazul). Nadie había descubierto que hay vida en los últimos minutos de juego. Nadie había resistido en pie las diabólicas contras, nadie había encajado menos de tres goles allí".
El diario As habló del buen juego que se vio en el partido. "Real Madrid y Málaga regalaron un encuentro de esos que se disfrutan de principio a fin, agotador por el ritmo al que se vivió, por ese continuo ir y venir. En un partido intenso y emocionante hasta el final, los dos pusieron las cartas boca arriba de inicio y se dispusieron a resolver el duelo a campo abierto, pero en vez de intercambiar golpes se retaron con un pincel en la mano para dibujar sobre el césped una respuesta a las obras pintadas por el rival".
Parecido fue lo que escribió La Vanguardia. "El partido fue un bello espéctáculo de principio a fin. Tanto el Real Madrid como el Málaga aplicaron desde el comienzo la intensidad necesaria para merecer la victoria, pero cada uno con el librillo particular el que presume cada uno de sus entrenadores".