El DT tuvo un momento especial en San Carlos de Apoquindo al seguir con vida en la Libertadores.
EFESANTIAGO.- El agónico triunfo que consiguió Universidad Católica por 2-1 ante Unión Española por Copa Libertadores dejó sensaciones gratas en la tienda cruzada. La primera y la más clara fue el reencuentro que tuvo el entrenador Mario Lepe con la hinchada de la UC.
Desde hace un tiempo que las cosas en el elenco de la precordillera no marchan bien y la victoria de este miércoles sirvió para acercar nuevamente el vínculo entre fanáticos y técnico, respaldado por la apuesta ofensiva del estratega.
El síntoma más evidente fue la gran ovación que se llevó el DT una vez finalizado el encuentro, donde los presentes en el estadio brindaron un gran aplauso al adiestrador y a sus dirigidos.
Uno de las factores que permitieron esta cercanía fue el cambio táctico ofensivo con el que Lepe enfrentó el trascendental lance. El técnico salió con tres delanteros (uno algo más mentiroso), más un enlace, lo que tuvo recompensa con el tempranero gol de Roberto Ovelar a los 7 minutos de partido.
El esquema dio resultado
La labor de Francisco Pizarro fue fundamental en el planteamiento del conjunto de la franja. El delantero no sólo se dedicó al ataque, sino que también participó en la recuperación de balones ocupando la banda por el sector derecho.
Las ganas de Lepe de quedarse con el triunfo eran evidentes. El ex jugador gritó constantemente: "Salgamos, apretemos, presionemos", incitando a sus jugadores para que se hicieran dominadores del compromiso.
El apoyo a sus dirigidos
Se transformó en un habitual durante el desarrollo del cotejo. Desde el primer minuto se vio a un DT acompañando cada una de las acciones de sus futbolistas. Estuvo en los buenos y en los malos momentos y nunca dejó de aplaudir en señal de ánimo para que los cruzados siguieran atacando.
Pero cuando todo marchaba bien la expulsión de Matías Campos Toro llegó para dificultar las cosas. Aún quedaba compromiso y lo que se venía era una embestida del elenco de José Luis Sierra, pero Lepe tomó decisiones correctas y la confianza del equipo siguió hasta el final.
La euforia de la victoria
Fue una celebración especial. A poco del final los tres puntos se quedaban en casa, pero el empate de Unión provocó que los hinchas de la UC nuevamente pensaran que el triunfo se escapaba en los últimos minutos.
Hasta que apareció Daud Gazale. El delantero había ingresado por Francisco Pizarro y cuando el estadio estaba silenciado convirtió el tanto que sentenció la victoria del equipo estudiantil. Resultado: Católica volvía a posicionarse en el grupo y tras el pitazo final Lepe corrió por los alrededores del banco saltando y abrazando a quien se le cruzara por su camino.
Ahora el entrenador cruzado y sus dirigidos deberán ratificar la victoria ante los hispanos en los dos últimos partidos de la Libertadores ante Junior y Bolívar, donde el mismo adiestrador reconoció que volverá a utilizar el esquema ofensivo para ganar los encuentros.