Jugadores de Emelec celebran el decisivo triunfo logrado en Asunción.
Reuters
ASUNCIÓN.- Emelec cumplió este jueves en Asunción una hazaña histórica al derrotar 3-2 en los últimos minutos a Olimpia de Paraguay.
De esta manera, el equipo ecuatoriano se quedó con el segundo paso a octavos de final del grupo 2 de la Copa Libertadores, tras jugarse la sexta y última fecha de la llave. De paso, dejó fuera al brasileño Flamengo, pese a que los cariocas
golearon a Lanús.
Con este resultado, el cuadro argentino quedó en primer lugar con 10 puntos, seguido por Emelec con 9.
Flamengo, que venció 3-0 al "granate" trasandino en Rio de Janeiro y necesitaba el empate en Asunción, quedó eliminado con 8 puntos, al igual que Olimpia, que se mantuvo en el último lugar con 7.
Final electrizante
La victoria del conjunto eléctrico comenzó a ser construida por el primer tanto anotado por el delantero Marcos Mondaini a los 66 minutos, tras un pase perfecto desde la derecha de Valencia.
Fue el gol del empate, porque Olimpia se había adelantado en el marcador a los 45 minutos por intermedio del atacante Arnaldo Castorino.
El punto de inflexión para los locales se produjo dos minutos después del reinicio del partido. cuando el mismo Mondaini provocó una falta descalificadora contra el defensa Enrique Meza, quien cayó encima de su arquero, el uruguayo Martín Silva. Este quedó con la pierna doblada por el impacto.
Ambos debieron abandonar el campo de juego minutos más tarde y al técnico Gerardo Pelusso no le quedó más remedio que cambiar arquero por arquero y defensa por defensa.
El partido se presentó como anillo al dedo para los dirigidos por el técnico ecuatoriano Marcelo Fleitas, quien envió más delanteros al campo de juego, entre ellos Polo Wila, quien avivó el ataque de los visitantes.
Tras varias jugadas de gol desperdiciadas, a los 87 minutos, Ángel Mena fusiló de frente el arco rival.
A los 91' se produjo el nuevo empate parcial de Olimpia (2-2) por intermedio de Zeballos, pero dos minutos después José Luis Quiñónez aprovechó un tiro de esquina para liquidar el dramático encuentro.