EMOLTV

La historia de la tenista chilena a la que un huracán le cambió la vida

Hace 12 años una violenta tormenta en las Islas Vírgenes le provocó un grave accidente a Francisca Mardones que la dejó inválida. Pero salió adelante y hoy es la segunda mejor tenista en silla de ruedas del país y 27° del mundo.

15 de Abril de 2012 | 14:45 | Por Javier Mauricio Ugarte Marisio, Emol
imagen

''En muy pocas ocasiones, contada con los dedos, he sentido la discriminación de algunas personas. Pero no me hago problemas porque depende de la actitud que uno tenga en la vida'', señaló Francisca Mardones.

Headline

SANTIAGO.- En la cancha dos del Estadio Croata la tenista chilena Francisca Mardones (34) saca una fuerte derecha cruzada que deja sin opción a su rival. Algunos jóvenes que la observan la aplauden por el sólido remate, pero ella, muy concentrada, gira su silla de ruedas y va por otro buen punto.

Es la "Pancha", esa joven a la que hace 12 años un violento huracán en las Islas Vírgenes le cambió la vida.

"Estudiaba administración hotelera y me fui a trabajar a cargo de unas cabañas en la Isla Culebra. Un día hubo un fuerte huracán, pero no tenía miedo. Mi problema era velar por los huéspedes y ayudarlos a que estuvieran tranquilos. En un momento salí a ver cómo estaba todo fuera de la cabaña y me caí a un barranco. Quedé inmovilizada por varios minutos, pero logré arrastrarme y salí con vida del lugar. Después, todo cambió...", recordó Francisca el episodio que la dejó discapacitada, pero que "no me quitó la fuerza para vivir y salir adelante".

"Después de varias operaciones en mi columna estuve como cuatro años en rehabilitación. Fue súper complicado, pero nunca me entregué, todo lo contrario, sabía que era una prueba que debía superar...", comentó. 

Desde pequeña fue amante de los deportes y su sueño era ser profesional y llegar a representar a Chile en unos Juegos Olímpicos. Por eso, tras el accidente no bajó los brazos y a los 28 años comenzó a jugar tenis en silla de ruedas, disciplina que por estos días la tiene como una de las máximas exponentes del país.

"Siempre me gustó el deporte. Jugaba básquetbol y vóleibol. Pero después de lo que me pasó me dediqué al tenis. La verdad que no fue fácil, fue algo muy duro, sobre todo por la coordinación y los movimientos. Pero quería salir adelante y hoy me siento muy feliz, mi vida hace rato que ya tomó un sentido", afirmó, la N° 2 de Chile y 27° del ranking mundial de tenis en silla de ruedas.

Pero el camino para llegar a donde está no ha sido algo simple. "En muy pocas ocasiones, contada con los dedos, he sentido la discriminación de algunas personas. Pero no me hago problemas porque depende de la actitud que uno tenga en la vida. Si mi postura es ser feliz y optimista nadie te mira la silla, pero sin andas con lastima todo es distinto y te ven con pena, lo que no es mi caso".

Y está feliz: "Me siento una agradecida del tenis y la verdad que no me puedo quejar de nada. Vivo sola, pago mis cuentas, tengo un taller donde les enseño tenis a personas con discapacidades mentales y realizo charlas motivacionales; eso me tiene muy contenta y con muchas ganas de vivir la vida. Me siento orgullosa por lo que estoy haciendo".

"Falta que nos valoren más"

Francisca está ansiosa porque el miércoles viaja a Sudáfrica a competir en una serie de torneos. Luego partirá a Estados Unidos y terminará a fines de mayo su gira en el mundial de tenis de silla de ruedas, en Corea del Sur.

"Tengo muchas ganas de partir y jugar lo mejor que pueda. Es un momento muy importante en mi vida, porque a fines de mayo debiera saber si logro el puntaje para asistir a las Paraolimpíadas y cumplir por fin mi sueño", señaló.

Pero no es distinta la realidad que vive la "Pancha" a la de otros deportistas, sean o no discapacitados. "Como siempre pasa, no es fácil obtener los recursos para desarrollar tu deporte. Tengo la suerte de contar con el financiamiento deportivo de una empresa y de ADO. Me llega un presupuesto anual, pero ya en octubre debo apretarme un poco o sacar de mis ahorros para poder viajar a los campeonato, eso le ocurre a muchos deportistas".

Y agregó: "Quizás falta que nos valoren más. No lo digo por los discapacitados, sino por todos aquellos que amamos el deporte y que vivimos de el. No pido que me regalen las cosas, eso no corresponde, sino que nos brinden el apoyo mínimo y que crean en nosotros".

Francisca Mardones toma su raqueta y comienza una nueva jornada de entrenamiento con una sola cosa en mente: "Seguir creciendo como tenista y estar entre las 10 mejores del mundo, sé que lo voy a lograr". Suerte "Pancha".

EL COMENTARISTA OPINA
¿Cómo puedo ser parte del Comentarista Opina?