BUENOS AIRES.- El colombiano Teófilo Gutiérrez parece tener los días contados en Racing después de que ayer amenazara a sus compañeros con un revólver de juguete al ser increpado en el vestuario tras su expulsión en la derrota en el clásico del fútbol argentino ante Independiente por 4-1, señala este domingo la prensa local.
Algunos dirigentes de peso de la comisión directiva de Racing piden la rescisión del vínculo del colombiano, que tiene dos años más de vigencia, indican las fuentes.
El delantero sufrió el sábado la segunda expulsión en el torneo, la cuarta en los 41 partidos que tiene en el club, tras insultar al árbitro Sergio Pezzotta. Al término del encuentro, Gutiérrez fue increpado por el arquero Sebastián Saja y por el defensor Lucas Aveldaño, quienes le recriminaron que se había hecho expulsar burdamente a los 68 minutos, cuando el equipo estaba perdiendo.
Según indican los medios locales, el colombiano le dijo "carón" (en Colombia significa sinvergüenza), pero Pezzotta entendió que le dijo "cagón" (cobarde). Cuando la discusión el vestuario se puso más tensa, y comenzaron los golpes entre Saja y Gutiérrez, el colombiano sacó un revólver de juguete para intimidar a sus compañeros, informan hoy los medios.
En medio del descontrol, el colombiano Giovanni Moreno recibió un golpe en su pómulo al intentar separar a ambos jugadores. Como mostraron las imágenes de televisión, el jugador debió abandonar en soledad el estadio de Independiente en un taxi, ya que sus compañeros no lo querían en el ómnibus que los había trasladado a la concentración.
Gutiérrez ya protagonizó reiterados actos de indisciplina dentro de los vestuarios y en los entrenamientos. El jugador, que nació en el barrio de "La Chinita", en la ciudad colombiana de Barranquilla, dijo alguna vez que el fútbol lo había sacado de la marginalidad.
"Siempre tuve la mentalidad de llegar a ser alguien en la vida. El talento siempre lo tuve y mis padres fueron los que me inculcaron el fútbol", afirmó. Comenzó su carrera profesional en el club Barranquilla, de la segunda división colombiana y en el 2006 pasó Junior.
En 2009, tras marcar 30 goles la Federación Internacional de Historia y Estadística de Fútbol (IFFHS) lo ubicó cuarto en la lista de los máximos goleadores de aquel año. En 2010 fue fichado por el Trabzonspor, equipo con el que ganó ese año la Copa de Turquía y la Superliga.
En un partido por La liga turca ante el Besiktas, el colombiano golpeó en pleno partido al defensor Ibrahim Toraman. El hecho derivó en incidentes entre los jugadores de ambos equipos, las suspensión del partido por varios minutos y la posterior expulsión de Gutiérrez.
Racing tendrá que decidir ahora qué hará con el polémico jugador colombiano, cuyo representante Efraín Pachón adelantó que el delantero no rescindirá su contrato con la "Academia".
La derrota en el clásico de ayer dejó además otro flanco abierto a los dirigentes, que deberán tomar una decisión relevante: quién será el futuro técnico de Racing tras la renuncia, aún no oficializada- de Alfio "Coco" Basile.
"Las pelotas, sigo", fue lo único que dijo Basile al retirarse del vestuario tras la goleada a su equipo. Horas después trascendió que le presentó la renuncia al presidente de Racing, Gastón Cogorno. Para Basile se terminaba el quinto ciclo en el club tras sólo diez fechas. Y para Teo Gutiérrez seguramente también.
