El número uno del mundo espera rival entre el vencedor de Nadal y Simon.
EFEMONTECARLO.- El serbio Novak Djokovic se impuso este sábado al checo Tomas Berdych en un complicado duelo, donde además tuvo que batallar con los fuertes vientos, y avanzó a la final del Masters 1000 de Montecarlo.
El número uno del mundo, Djokovic ganó por parciales de 4-6, 6-3 y 6-2 y ahora se medirá mañana ante el ganador de la otra semifinal, que enfrenta al español Rafael Nadal con el francés Gilles Simon.
Durante una hora, Berdych fue el mejor tenista del mundo. Sus golpes eran sablazos que dejaban huella en el rectángulo naranja del Monte Carlo Country Club, mientras la intensidad del viento proveniente del Mediterráneo iba en ascenso.
Secos reveses paralelos, planas derechas cruzadas y servicio demoledor: Berdych era una delicia de tenista. Sólo Djokovic sufría con lo que el checo ofrecía. Pero Berdych es el número siete del mundo por una razón clave: le cuesta mucho mantener a lo largo de todo un partido ese gran nivel que mostró en el primer set de hoy.
Y si a eso se le suma que el viento comenzó a complicar su servicio -el checo lanza la pelota muy alta-, se entiende que su tenis comenzara a caer. Del otro lado de la red, además, estaba el que sí es el mejor jugador del mundo, un hombre que no sabe aún lo que es ser campeón en Montecarlo, el sitio en el que pasa sus días cuando no está en el circuito.
Paciente y astuto, Djokovic ajustó su juego y aprovechó las inconsistencias del rival, enloquecido ya por los remolinos que se formaban en la cancha, hasta convertir el duelo en un enfrentamiento desigual y bastante menos atractivo que en el inicio para quedarse con la victoria y sumar una nueva final a su carrera.