EFE
SAKHIR (Bahréin).- El jefe de los derechos de la Fórmula 1, Bernie Ecclestone, tiene la intención de que el Mundial regrese en 2013 a Bahrein, donde este fin de semana se celebró el cuarto Gran Premio de la temporada en medio de una gran controversia.
La carrera del desierto se celebrará "mientras ellos (los organizadores) lo quieran", señaló el británico el domingo después de que el alemán Sebastian Vettel venciera en Bahrein.
El país está profundamente dividido desde que comenzaran las protestas en favor de una reforma hace ya más de un año. Durante las manifestaciones acaecidas murieron más de 50 personas.
"Yo pienso que es bueno, porque así la gente habla del asunto. Eso quiere decir que no existe eso de la mala publicidad", dijo el magnate de 81 años.
El movimiento de protesta en Bahrein y las organizaciones defensoras de los derechos humanos acusaron a la Fórmula 1 de ser utilizada por la casa real del país del Golfo Pérsico y de dar una imagen falsa acerca de la situación real.
Durante el fin de semana hubo manifestaciones y enfrentamientos entre activistas y fuerzas de seguridad. Pero Ecclestone quiere mantener su contrato a largo plazo con Bahrein.
"Por supuesto. Siempre. No hay problema", aseguró. El crecimiento de la Fórmula 1 en Bahrein y en Cercano Oriente es un hecho, agregó Ecclestone.
Hay muchos intereses en la región para expandir el Mundial de Fórmula 1. Bahrein se convirtió en 2004 en el primer país de Cercano Oriente en albergar un Gran Premio de Fórmula 1.
En 2009 siguió Abu Dabi. "Mirando la disponibilidad de capital, aquí está el foco más grande del mundo", apuntó Gerard López, dueño del equipo Lotus.