''Como deportista de alto rendimiento no se puede vivir en Chile, por eso siempre tuve claro que debía estudiar'', señala Berta Rodríguez.
La SegundaSANTIAGO.- "Estoy cumpliendo un sueño y la verdad que con 40 años me siento orgullosa de estar presente en mis cuartos Juegos Olímpicos". La tenimesista chilena Berta Rodríguez reconoce que está viviendo "con muchas ansias" la víspera de las próximas olimpiadas que arrancarán el 27 de julio.
Y su felicidad es total. "A mi edad no es fácil estar nuevamente en una cita deportiva tan importante como está, pero cuando te propones algo y eres conciente que no puedes aflojar, la perseverancia y responsabilidad te van a llevar a cumplir tus metas...estoy feliz", declara a Emol.
Su debut en la cita olímpica fue en "Atlanta, en 1996. Recuerdo que me tocó el primer partido con una china que era tres del mundo. Obviamente los nervios me traicionaron y me ganó con claridad. Después vino Sydney, en 2000 y luego Atenas 2004. Lamentablemente en las tres participaciones no he podido ganar un partido, pero ahora siento que llegó el momento de obtener una victoria, no me puedo retirar de la actividad sin celebrar un triunfo en unos Juegos Olímpicos", afirma con fuerza.
La historia deportiva de Berta se inició en Renca. Ahí sus hermanos (son siete) le recomendaron que se dedicara al tenis de mesa. "A los 8 años comencé a jugar y a los 10 ya estaba participando en mi primer campeonato. Recuerdo que salí tercera y me di cuenta que esto era lo mío, y aunque tenía el apoyo de mi familia el aspecto económico era un tema relevante que tenía que enfrentar día a día", asegura.
Si bien reconoce que el tenis de mesa "es más barato" que otras disciplinas "como deportista de alto rendimiento no se puede vivir en Chile, por eso siempre tuve claro que debía estudiar una carrera profesional".
Hoy, esta técnico en programación y electrónica pasa su tiempo entre los entrenamientos y la venta de muebles. "Sin un trabajo estable y además con toda la ayuda que me entregan en la empresa (del rubro retail) no podría haber llegado a donde estoy. Me organizo de muy buena forma. Los martes y jueves entrenó en doble jornada, y los lunes, miércoles y viernes trabajo medio día".
Cuenta que "primero estuve en el área de jardinería, después pasé a despacho, cerámica, iluminación y ahora estoy en venta de muebles. Lo mejor de todo es que trabajo con un buen equipo y todos me apoyan con mi actividad deportiva".
Y como una de las principales exponentes del tenis de mesa nacional, Berta enseña su técnica a sus compañeros de trabajo. "Siempre me piden que juguemos un torneo o que les enseñe algunos golpes y obviamente ahí estoy con ellos, pero no juego campeonatos".
"Todos tenemos méritos para ser abanderado en Londres"
Berta adelanta que estos serán sus últimos Juegos Olímpicos. "Me parece que ya cumplí, es suficiente. A mi edad no es fácil estar por cuarta vez en unas olimpiadas, pues las rivales a nivel internacional son más jóvenes y juegan muy bien".
Pero además de las ansias que tiene por llegar pronto a Londres hay otra cosa que ilusiona a Rodríguez: ser la abanderada de la delegación chilena que participará en la cita olímpica.
"Todos tenemos méritos para ser abanderado en Londres. Hay varios que por su trayectoria debieran ser u otros por sus logros", señala, pero también reconoce que ya le han comentado que su nombre está entre los candidatos.
"Algo escuché por ahí y la verdad que me ilusiona mucho, sería otro gran sueño cumplido, pero entiendo que se elegirá a través de votación popular y creo que deberían ser los deportistas quienes eligiéramos al abanderado. El COCH (Comité Olímpico de Chile) nos entrega una terna y nosotros votamos", apunta.
Por estos días Berta se recupera de una lesión en su codo derecho para luego partir a competir a mediados de mayo a Cuba y Costa Rica. Posteriormente se centrará en el último gran desafió de su carrera deportiva: los Juegos Olímpicos de Londres 2012.