David Silva del City, celebra uno de los goles del 6-1 de la ida sobre el United.
Reuters
LONDRES.- Los propios protagonistas lo admiten, el duelo de este lunes entre Manchester City y Manchester United será "la madre de todos los derbis", una "final" decisiva para el título de la Premier League inglesa de fútbol.
Alex Ferguson, el técnico del United, cree que es "el derbi de Manchester más importante" desde que dirige a los "diablos rojos", hace 26 años.
"Sólo un masoquista podría disfrutarlo", dijo antes del choque del lunes por la noche en la cancha del City, el Etihad Stadium. "Y yo soy un masoquista convencido. Lo soy desde hace 26 años".
A falta de tres jornadas para el final del campeonato, el United es líder con sólo tres puntos de ventaja sobre su vecino, que de ganar mañana igualará en puntos a su rival, pero se pondrá en la punta por una mejor diferencia de goles.
También el técnico del City, el italiano Roberto Mancini, habla del choque más importante entre los vecinos de Manchester "desde hace 50 años": la última vez que los "citizens" fueron campeones fue en 1968. Se estima que 650 millones de personas puedan ver el partido por televisión en todo el mundo, un récord en la Premier League.
"La gente dice que es el partido más importante de la historia de la Premier League", aseguró el mediocampista del City Gareth Barry. "Es un buen partido porque representaremos a la ciudad en todo el mundo. Nos verán en 203 países y Michel Platini (presidente de la UEFA) quiere venir", dijo Ferguson, de 70 años y que se llevó a su equipo a concentrarse al sur de Gales. "Fergie" no quiere dejar escapar el vigésimo título de Liga del United, que sería el decimotercero bajo su mando.
Fueron precisamente los "diablos rojos" los que aumentaron el interés por el duelo. Hasta hace poco tenían una cómoda renta de ocho punto en la clasificación y parecían ya campeones.
Mancini traslada el papel de favorito: "Nosotros no tenemos presión, porque no tenemos nada que perder. Para ellos, un empate ya sería un buen resultado". El italiano piensa más allá del duelo, ya que el City luego jugaría con el difícil Newcastle United, mientras que al United le quedarían "dos pártidos fáciles", según Mancini, ante Swansea City y Sunderland.
Pero Ferguson no sería Ferguson si no planteara una guerra psicológica contra su rival, y por ello devuelve la pelota: "Si el City gana el derbi, no creo que pierda el título".
A favor del conjunto celeste está que juega en casa y que en la ida, en octubre, goleó al United en Old Trafford por 6-1, lo que Ferguson definió con claridad: "El peor resultado de mi carrera".
Además, parece que los "citizens" llegan en mejor momento a la recta final gracias, entre otras cosas, al retorno del delantero argentino Carlos Tevez. En los últimos tres partidos, el equipo de Mancini anotó 12 goles, nueve de ellos a través del dúo argentino formado por Tevez y Sergio Agüero.
Mancini tendrá además como comodín en el banquillo al incontrolable delantero italiano Mario Balotelli una vez cumplida su última sanción. "Creo que para este partido puedo confiar en Mario", dijo el preparador, que hace unas semanas, tras una nueva expulsión, había dicho que no quería contar más con el jugador.
Lo que está a favor del Man-United es que dispone de esa experiencia y esa genética especial para los grandes partidos, y que el delantero Wayne Rooney está en una buena forma: en los últimos 14 partidos oficiales marcó 16 tantos.
"El City está invicto en casa y nosotros tenemos el mejor balance como visitantes. Es el partido decisivo y el que gane se llevará el gran premio", dijo Ferguson antes del derbi de la ciudad número 162.
El escocés respeta ahora a un oponente, un nuevo rico financiado por petrodólares, al que la pasada temporada definió como "un equipo pequeño con mentalidad pequeña".