SANTIAGO.- El presidente del Independiente de Avellaneda, Javier Cantero, denunció este jueves haber sido amenazado por un grupo de hinchas violentos del equipo argentino.
"Tengo miedo pero no me van a torcer el brazo por irrumpir en mi oficina. Hasta el 2014 (cuando termina su mandato) voy a seguir diciéndoles 'no' a los barras bravas", dijo Cantero en declaraciones a medios locales.
El dirigente contó que unos 30 ultras del equipo ingresaron de manera violenta a sus oficinas en el club y aseguró que no llegaron a pegarle pero sí se agredieron verbalmente de manera mutua.
"Me pidieron entradas, ómnibus y guardar las banderas en las instalaciones del club. Yo creo que ese es un riesgo grande, ya que dentro de ellas se puede esconder cualquier cosa y no voy a asumir esa responsabilidad", afirmó.
Cantero, que desde que asumió su mandato, a finales del 2011, lideró una suerte de cruzada contra los ultras del Independiente, consideró que se puede luchar contra los hinchas violentos. "A veces no hay voluntad", opinó.
Además, matizó que hay "una estrecha relación política con las barras" e insistió en que, aunque siente miedo, no dará marcha atrás con su decisión de combatir a los hinchas violentos.