SANTIAGO.- La emoción y adrenalina de la final del Suzuki Mx fueled by Burn debió retrasarse en una semana, debido al temporal de lluvia y viento que azotó a la ciudad de San Antonio, el fin de semana pasado. Esta vez, el clima acompañó con un día soleado pero con un fuerte viento frío.
Esas condiciones fueron las que recibieron a los cerca de 250 pilotos y más de dos mil espectadores que se acercaron a la pista Altos de Llolleo, para presenciar la gran final de Nacional de Motocross 2012.
En la primera manga de la Pro Open, si bien fue el argentino José Felipe quien se quedó con el hole shot, fueron Pablo y Leo Quintanilla quienes dominaron durante todo el recorrido. Ambos pilotos monopolizaron su andar, peleando vuelta a vuelta la punta, mientras recién, a más de cuarenta segundos, aparecía el trasandino. De esta manera Pablo Quintanilla se quedaba con el heat inicial llegando a la meta 1,7 segundos antes que su hermano Leonardo.
En la segunda manga, Pablo se quedó con el hole shot, sin embargo Leo tomó rápido el liderato de la prueba, disputando nuevamente de cerca con su hermano la punta. Nicolás Aravena y José Felipe, quienes también tenían opciones de quedarse con el título, nuevamente anduvieron más lento, dejando claro que el campeonato quedaría en
manos de alguno de los Quintanilla.
En la mitad de la manga, Pablo sufrió una caída, dejándole el camino libre a su hermano Leo, quien obtuvo el triunfo y se consagró tricampeón del Suzuki MX fueled by Burn.
Los campeones nacionales en el resto de las categorías fueron Israel Sanz (50 cc), Hardy Muñoz (65 cc), Gerardo Felipe (Master B), Josefina Garlduski (Mujeres), Jeremías Aravena (85 cc Infantil), Manuel Pavez (85 cc ULM), Brian Sanz (MX2B) y Diego Rojas (MX2A), Germán Tacchi (MX1B) y Gerardo Schiele (Master A).