AFP
SANTIAGO.- Charles Aránguiz junto a Marcelo Díaz se han transformado en dos de los grandes baluartes de los éxitos que ha tenido desde hace ya más de un año la Universidad de Chile.
El ex Quilmes de Argentina sabe que mañana, en la semifinal de vuelta de la Copa Libertadores ante Boca Juniors, se juegan gran parte de la temporada, pero irradia optimismo y fe en que lograrán el objetivo.
"Está claro que tenemos razones futbolísticas de sobra para dar vuelta la serie. Si entramos concentrados, esa parte va a salir bien. Lo importante ahora es templar en ánimo", expresó en entrevista al portal de la FIFA.
La U tiene la obligación de reponerse del 2-0 de la ida en La Bombonera, por lo que Aránguiz señala que "debemos jugar concentrados, apostar a lo nuestro y hacer un partido inteligente. Tenemos todo lo que hace falta revertir esta situación".
Misma situación los afecta en el Torneo de Apertura, donde Colo Colo se impuso por similar marcador en la semifinal de ida disputada en el Monumental. "Las derrotas nos golpearon fuerte, pero no hay tiempo para lamentos", enfatiza.
El mediocampista destacó por convertir dos goles en los últimos lances de la selección chilena en las Clasificatorias, sin embargo en el torneo continental no ha estado muy oportuno en las redes. Es por eso que comenta que "contra Boca sería un buen momento para empezar a hacerlos".
"La clave, sea yo o cualquiera, pasará por no desaprovechar las opciones que tengamos. Ellos tienen mucho oficio y no van a darnos muchas oportunidades", añadió.
Al momento de analizar el duelo de ida, Aránguiz expresa que "Boca no te da espacios, te presiona muy arriba… Eso nos sorprendió en Buenos Aires: nos apretaron cerca de nuestra área y jamás pudimos hacer nuestro juego, que es por abajo, siendo dinámicos y rotando harto para abrir huecos. Sencillamente no nos dejaron".