Los jugadores españoles celebran el cuarto gol ante Italia.
AFP
SANTIAGO.- Para Italia, era la oportunidad de tomarse revancha de lo sucedido en la Eurocopa 2008, donde España los había eliminados en cuartos de final, mediante los penales. Para los ibéricos, la chance de conseguir el bicampeonato del torneo y sumar a sus vitrinas otra copa.
Al final, la Eurocopa 2012 fue para España, que en el duelo definitorio ante la "azzurra" y bajo la batuta de Xavi, se llevó el partido por 4-0 y demostró que su fútbol total sigue más vigente que nunca, a pesar de los detractores que dicen que el juego hispano "aburre".
En el Estadio Olímpico de Ucrania, Andrés Iniesta, Jordi Alba, Iker Casillas y compañía salieron con todo a marcar el primer gol, mientras los italianos sólo se dedicaban a defender su arco, al menos durante los primeros 13 minutos, cuando cayó el gol de David Silva.
El mediocampista del Manchester City definió de cabeza una tremenda jugada de su escuadra: Pase entre líneas de Xavi para Ces Fábregas, quien ganó línea de fondo y sacó un centro para que el volante abriera la cuenta y desatara la euforia de los hinchas de la "Furia Roja".
El gol provocó la reacción de los italianos, que comenzaron a apoderarse de la pelota, algo muy difícil cuando al frente se tiene a España. Sin embargo, a los 41' de partido, una nueva genialidad de Xavi comenzó a equilibrar el partido en favor del actual campeón del mundo.
El compañero de Alexis Sánchez en el Barcelona se vistió de mago para asistir a Jordi Alba, quien pasó como un tren por el costado izquierdo, le ganó la posición a los defensas italianos y puso el 2-0 para su escuadra. El partido del volante fue redondo, justo cuando en la previa había declarado que le hubiera gustado ser más trascendente para su escuadra.
Con eso llegó el descanso. El inicio de la segunda fracción vio a una Italia intentando anotar el descuento que le diera una luz de esperanza, aunque todo se vino abajo a los 61', cuando el recién ingresado Thiago Motta tuvo que abandonar por lesión. La mala noticia para el DT Cesare Prandelli es que ya había agotado todos los cambios, por lo que su escuadra se quedó con uno menos hasta el final del partido.
Los minutos finales vieron a una España generando fútbol por doquier y a una Italia resignada con la derrota. Incluso Fernando Torres se dio maña para hacerse presente en el marcador tras convertir el 3-0 final luego de una nueva exquisita habilitación del, por escándalo, mejor jugador de la final: Xavi. ¿La guinda de la torta? Juan Mata, tres minutos después de haber reemplazado a Iniesta puso el 4-0, tras pase del propio Torres.
Hasta que llegó el pitazo final de Pedro Proenca y la locura para el equipo rojo, que, en cuatro años supo levantar dos Eurocopa y una Copa del Mundo. A eso hay que sumarle los título del Real Madrid, Barcelona y Atlético de Madrid en las copas de clubes europeas.
El resumen de España en la Euro arroja seis partidos jugados, con cuatro triunfos y dos empates, habiendo convertido 12 goles y permitiendo sólo uno en contra. La Furia Roja de Vicente del Bosque se consagró como uno de los mejores equipos de la historia.
