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SANTIAGO.- Boca Juniors perdió la final de la Copa Libertadores 2012 ante Corinthians, pero sin lugar a dudas la gran pérdida de esta noche será la renuncia de Juan Román Riquelme, capitán y figura principal del cuadro xeneize.
Antes del partido ya se había anunciado que tras el pitazo final, Riquelme tiraría "una bomba". Y así fue.
"No jugaré más en Boca. Hablé con el equipo y el presidente y le comuniqué que no voy a continuar, que amo a este club, que voy a estar agradecido por siempre con Boca. El compromiso que tengo con la gente es enorme, pero me siento vacío, no sé si les he dado mucho, o poco, pero siento que estoy vacío", fueron sus palabras en medio de lágrimas.
Román continúo señalando que "estoy vacío, el compromiso que tengo con el club es muy grande. Yo no puedo jugar a la mitad, llevo 16 años en el fútbol, he vivido para el fútbol. No tengo más nada para dar al club. Pensé que nunca más iba a jugar una final de Copa".
El ex Villarreal comentó que, y pensando en su futuro, "ahora sólo quiero ir a mi casa, abrazar a mis hijos, comer asados con mis amigos. Hablaré con mi nene de 9 años, y si me quiere ver jugar, lo haré, pero no acá, porque no tengo más que dar".
"Soy bostero y moriré siendo bostero" fueron las sentidas declaraciones del capitán de los xeneizes que se va sin poder levantar una nueva Copa Libertadores.
