Marco Muga, El Mercurio
SANTIAGO.- La final del Torneo de Apertura tuvo tres protagonistas: Universidad de CHile, O'Higgins y el árbitro del encuentro Enrique Osses.
El juez que dirigió el último partido del campeonato nacional tuvo una serie de desaciertos que causaron una encendida polémica una vez terminado el encuentro, donde la U de Jorge Sampaoli se quedó con el título del certamen.
Y luego de eso Osses no volvió a ver acción por lo que empezaron una serie de rumores que hablaban desde una supuesta sanción hasta una enfermedad, pero él mismo decidió sacar la voz y aclarar todo.
"Yo merecía ser castigado, hice una pésima final y debí haber sido sancionado, no tengo ningún problema en decirlo", explicó sincero luego de finalizado el duelo entre Palestino y Unión La Calera por la tercera fecha del Clausura.
Y siguió: "Hay algunos errores que fueron objetivos y otros que magnificó la prensa para generar polémica. Evidentemente el penal que le cobro a Marino es el error más grave, junto con el penal de Enzo Gutiérrez. Sentí que las críticas tuvieron falta de claridad y fueron subjetivas. Para mí fueron sólo dos jugadas polémicas".
De esta forma Osses da por cerrado el tema y se enfocará en realizar un buen cometido en el actual torneo nacional.