ESTOCOLMO.- Brasil goleó 3-0 a Suecia este miércoles en la despedida del Raasunda, mítico estadio en que ganó su primer título mundial en 1958, en la reedición de la final de aquella edición.
El duelo sirvió para que el técnico Mano Menezes volviera de Europa con una alegría tras la plata olímpica, que fue un fracaso para los pentacampeones.
El conjunto auriverde se impuso con un tantos del artillero Leandro Damiao (32) y un doblete de Alexandre Pato (84, 86 de penal).
En Suecia se notó la ausencia de su as Zlatan Ibrahimovic, quien quedó fuera por lesión y eso repercutió en el pobre potencial ofensivo de los suecos.
El partido que se abrió con el puntapié inicial simbólico de Pelé, quien presenció el amistoso desde la platea como invitado de honor por liderar el once que ganó 5-2 al anfitrión la final de 1958 en Raasunda y le dio a Brasil el primero de sus cinco títulos mundiales, fue dominado de cabo a rabo por los sudamericanos.