Clijsters y Bryan perdieron, pero de todos modos se fueron con una sonrisa del US Open.
AP
NUEVA YORK.- La belga Kim Clijsters dijo adiós definitivamente al tenis y puso fin a su carrera profesional este sábado, al perder el partido de dobles mixtos en el Abierto de Estados Unidos que se juega en Nueva York, torneo que ganó en tres oportunidades en individuales.
Clijsters y el estadounidense Bob Bryan fueron derrotados por el brasileño Bruno Soares y la rusa Ekaterina Makarova con parciales de 6-2, 3-6, 12-10, en un partido de segunda ronda en el estadio Grandstand de Flushing Meadows.
"Fue un honor ser parte de este estilo de vida y de este deporte. Empecé cuando tenía cuatro años y tenía tantas ilusiones, que se han hecho realidad", dijo Clijsters en su despedida de las canchas.
El miércoles, la ex número uno mundial había jugado su último partido profesional de singles, que perdió ante la adolescente británica Laura Robson en segunda ronda ."La vida continúa. Esta noche fue una de las razones por las que quería jugar en dobles mixtos. El tenis será siempre parte de mi vida", manifestó emocionada la belga de 29 años.
En su brillante carrera, la rubia valona archivó cuatro pergaminos de Grand Slam, 41 títulos en singles y 11 en dobles, en un periplo profesional que comenzó en 1997, a los 14 años de edad.
"He ganado muchas cosas hermosas y he hecho muchas amistades, pero ahora tengo un nuevo capítulo con mi familia", indicó en referencia a que se dedicará a estar más cerca de su hija Jada, fruto de su matrimonio de cuatro años con el ex basquetbolista de la NBA Bryan Lynch.
Clijsters ya había anunciado a principios de año que ésta sería su última temporada, y que esperaría retirarse en el Abierto de Estados Unidos, torneo que ganó en 2005, 2009 y 2010 para convertirse en una de las consentidas del difícil público neoyorquino.
En su última incursión en un US Open, fue eliminada además en dobles femeninos y ahora en el doble mixto, junto a uno de los legendarios hermanos Bryan, la pareja más ganadora en la historia del tenis profesional. "Ha sido un verdadero honor jugar con Kim. Ella es una verdadera campeona y ha demostrado ser toda una leyenda", dijo Bob Bryan.