AUSTIN.- Los rivales de Ferrari en la Fórmula 1 dijeron este lunes que no tenían mayores problemas con la decisión de la escudería italiana de provocar una penalización a Felipe Massa para favorecer al otro piloto, Fernando Alonso, que lucha por el título.
El británico Lewis Hamilton (McLaren) ganó el Gran Premio de Estados Unidos el domingo, en Austin (estado de Texas) por delante los dos que irán por el título la próxima semana en Brasil: el alemán Sebastian Vettel (Red Bull) y Alonso.
Pero el tercer puesto de Alonso se debió en buena parte a que largó desde el séptimo lugar y desde el lado limpio (menos resbaloso) de una pista que se estrenaba.
Alonso había clasificado noveno, pero una penalización de cinco puestos al francés Romain Grosjean (Lotus) por efectivamente cambiar la caja de cambios, lo subió al octavo y al lado sucio de la recta del "Circuito de las Américas".
Ferrari optó entonces por romper deliberadamente el sello de la caja de cambios de Massa, que partía sexto, retrasarlo al undécimo puesto y permitir que Alonso pase al séptimo lugar.
El tercer lugar de Alonso significa que llega a Brasil 13 puntos por detrás de Vettel y con el campeonato de pilotos abierto.
Pero al tiempo que muchos en el circo de la F1 criticaron la falta de ética deportiva en la decisión de Ferrari, Red Bull y McLaren evitaron las críticas directas.
El director del equipo Red Bull, Christian Horner, dijo: "Fue dentro de las reglas y fue una medida táctica. Obviamente tomaron esa decisión para que Fernando pasara al lado derecho de la parilla y funcionó para ellos".
Interrogado sobre si Red Bull pensó hacer lo mismo con el australiano Mark Webber para volver a colocar a Alonso en el lado sucio de la pista, Horner dijo "bueno, y después otro lo haría y Fernando largaría desde la primera fila. Nunca lo consideramos".
Martin Whitmarsh, jefe de McLaren, dijo por su parte que se trata de exactamente el tipo de política que su escudería se niega a aplicar, la de favorecer a un piloto sobre otro, y que esa fue la causa por la cual Alonso dejó el equipo tras una tormentosa temporada de 2007.
Pero evitó criticar a Ferrari
"Los equipos y los jefes de equipo pueden decidir cómo conducen sus programas. Fue duro, pero está muy claro que están concentrados en Fernando, y no olvidemos que Fernando estuvo con nosotros y fue por no hacer esas cosas que nos dejó".
"Pero si hubiera clasificado en el lado limpio y la medida me hubiera mandado al sucio estaría muy molesto", agregó.
El jefe de equipo de Ferrari, Stefano Domenicali, dijo por su parte que la decisión fue la correcta y dentro del espíritu del deporte.
"Prefiero ser totalmente transparente, porque uno puede fácilmente disimular algo como eso, pero sentí que era más correcto decir la verdad. Ese es nuestro estilo, mi estilo", afirmó.