MENDOZA.- En el hotel de concentración en Mendoza descansando las ideas y sin mayores esfuerzos. Así transcurre el día después de la selección chilena Sub 20 tras el histórico ante Argentina en su debut en el Sudamericano de la categoría que entrega cuatro cupos al Mundial de Turquía.
El plantel se mantuvo en su lugar de estadía en la ciudad mendocina, tratando de mantener la concentración total y centrándose en el próximo partido ante Bolivia (viernes, 22:15 horas).
Desde el interior del equipo no dan luces de euforia, sólo tranquilidad y el discurso es uno sólo: Continuar de esta manera y vencer a los altiplánicos, partido que comenzarán a vivir cuando hagan una suave práctica de cara al encuentro de mañana.
El propio Mario Salas reconoció tras vencer a los trasandinos que no sabía mucho de los bolivianos y en esta jornada todos se iban a centrar en revisar los puntos fuertes y debilidades de la escuadra que dirige Marco Barrero.
El entrenador nacional determinará en el club Gutiérrez, centro de entrenamientos de la escuadra juvenil criolla, desde las 19:00 horas, a los reemplazantes de los suspendidos Manuel Bravo y César Fuentes, quienes fueron expulsados ante Argentina.
En principio, serían Sebastián Martínez y Mario Larenas quienes tomen el lugar de los dos sancionados, pero eso se ratificará en la práctica vespertina.
El resto del once sería el mismo que derrotó al local este miércoles en el Malvinas Argentinas de Mendoza.