Nicolás Maturana es una de las figuras de la selección chilena Sub 20 en Mendoza.
AFPMENDOZA.- Mario Salas en pocos meses pasó de ser un desconocido entrenador a convertirse en el DT de la selección chilena Sub 20. Tras su destacada campaña con el modesto Barnechea, con el cual estuvo a un paso de ascender a Primera División, tras un año de participación en el fútbol profesional, tomó las riendas del cuadro juvenil en diciembre, luego de la partida de Fernando Carvallo.
Y para esta aventura, reclutó a tres de sus dirigidos en el cuadro metropolitano: Nicolás Maturana, Franco Ragusa e Ignacio Caroca, quienes se convirtieron en piezas claves del elenco que dilapidó tres chances de ascenso en la pasada temporada.
Si bien Maturana y Ragusa ya eran parte del proceso de Fernando Carvallo, con Salas se afirmaron en la nómina, junto con la presencia de Caroca, quien no estaba considerado en la época del "Pino".
Los tres analizan las claves de Salas para el buen rendimiento de esta Sub 20 con Emol, destacando el planteamiento agresivo y la cercanía que tiene con el jugador, lo cual fue captado de la mejor manera por el plantel en pocas semanas de gestión.
"Mario siempre nos decía en Barnechea, vamos para adelante, hay que luchar hasta la última, eso es muy destacable para un entrenador", dice Maturana, quien estuvo a préstamo en el segundo semestre proveniente de Universidad de Chile.
Por su parte, Ragusa, quien pertenece a Everton y que sumó minutos en 2012 en los de la parte oriente de la capital reconoce que Salas tiene ideas claras y que no modificó nada de lo que hacía antes. "Su estilo y planteamiento no ha cambiado, es uno sólo. Es presionar, ir para adelante y ser protagonistas todos los partidos, no importa el rival que tengamos al frente, así quedó demostrado en este torneo y así era en Barnechea", cuenta.
En tanto, Caroca, quien ganó notoriedad en la segunda parte del año y de ahí se proyectó hacía la Roja Sub 20, tras no tener opciones en Colo Colo, sentencia que: "no ha cambiado su manera de jugar. No porque sea Barnechea o la selección lo iba a hacer, siempre ha sido igual. Nos pide jugar hacia adelante, tomar riesgos y empujar al rival en su zona. Esa es su manera de sentir el fútbol".
"Ser como amigos y una familia"
No se queda allí el trío de jugadores y revelan que el ex mediocampista es muy cercano a ellos, trata al jugador con frontalidad y le pide lo mejor en cada entrenamiento. Además, indican que le gustan los planteles unidos, como si fueran una familia.
"Nos dice que seamos humildes, que nunca dejemos de luchar en ningún momento del partido, porque siempre puede ocurrir algo", confiesa Maturana.
Ragusa agrega que: "este un grupo unido, tal como era en Barnechea, donde todos teníamos un mismo objetivo, gracias a él. Ahora se ve una selección sólida y que da seguridad de lo que hace dentro de la cancha, eso es lo que siempre nos recalcó, tanto en Barnechea como en la selección".
Mientras que el hermano de Rafael, también volante de los albos, revela que: "él nos pide que seamos siempre unidos, como una familia. Nos recalca que nos ayudemos siempre en la cancha, no importa lo que pase, y eso el grupo lo asimiló muy bien y lo ves en la cancha".
Tres nombres que sirven para graficar al líder de una Roja Sub 20 que está centrada en un solo objetivo: clasificar al Mundial de Turquía y meter a Chile en un torneo de esta categoría tras seis años de ausencia.