SANTIAGO.- El técnico del Gremio de Porto Alegre, Vanderlei Luxemburgo, responsabilizó totalmente a su par de Huachipato, Jorge Pellicer, como el culpable de comenzar los disturbios con los que finalizó el duelo entre brasileños y chilenos por la Copa Libertadores.
"Fue una confusión innecesaria. Fui a saludar al árbitro, que es normal, a veces, se quejan que no lo hago, El asistente de ellos se me acercó y dijo: '¿hoy no se está quejando como la otra vez? (duelo de ida)'. Se me estaba acercando y me di cuenta de que estaba nervioso, empecé a correr, me di cuenta de que quería un desastre", comienza el brasileño haciendo referencia al ayudante técnico de los acereros.
Luxemburgo además realizó una fuerte acusación. "El entrenador también viene y yo no entendía por qué esta agresión. Me apresuré a entrar en el túnel. Cuando entré, se cerró el túnel y me resbalé. Un policía pasó por encima de mí. Solo fuimos allí para saludar al árbitro. Me di cuenta de que era una acción premeditada. No quiere pelear aquí, he ganado el juego, estoy clasificado. Todo lo que sucedió aquí fue algo premeditado y lamentable".
Por su parte, el jugador Douglas Grolli se sumó a las palabras de técnico y agregó que "el entrenador y ayudante agredieron a Vanderlei. Cuando lo vi caer a nuestro entrenador ellos vinieron y trataron de pegarle".
Asimismo, un fotógrafo del cuadro gaucho resultó agredido por una piedra que le cayó en su cabeza, por lo que debió ser atendido por el cuerpo médico del club.
Ahora, habrá que esperar lo que informe en su acta el árbitro uruguayo Martín Vásquez, documento que resultará clave para definir sanciones a uno u otro estratega por lo sucedido en el CAP de Talcahuano.