Franco y su felicidad.
UPISANTIAGO.- Estaba emocionado el técnico de Universidad de Chile, Darío Franco, tras ganar la Copa Chile y el primer título de su carrera. Celebró abrazado con su hijo, quien vino de Argentina a acompañarlo.
Tras el pitazo final de Eduardo Gamboa pareció sacarse un peso de encima y lo mostró su celebración, brazos en alto. Es que el trasandino sabía que estaba cuestionado y este torneo podía darle un aire a su proyecto.
Por eso, y con la alegría del título, aprovechó de enviar un mensaje y defender su idea de fútbol, sobre todo desafiando a aquellos que pedían más vértigo al equipo, muchos acostumbrados a la era Sampaoli.
"El título es lindo conseguirlo y darle esta alegría a la gente y la forma de lograrlo es lo que más satisfacción me da. Cómo buscamos el triunfo cuando la mitad del estadio pedía pelotazos al área. Esto demuestra que también se puede jugar y ganar de esta manera", dijo el adiestrador.
Luego apuntó que este equipo tiene "menos vértigo, pero creamos situaciones suficientes".
Agregó que siente satisfacción de "darle un título a toda la hinchada que nos ha apoyado y agradecimiento al cuerpo técnico por ayudarme a conseguir mi primer título".
Acerca de su futuro y las críticas a su trabajo reconoció que "es bueno que se den las victorias, porque hace que uno esté más tranquilo. Siempre he creído que terminaré mi contrato y el análisis debe hacerse al final del contrato".