Por qué los pone y por qué los saca.
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SANTIAGO.- La continuidad de Darío Franco en la U aún no está resuelta. Tampoco si es que deja el club, porque en la escuadra laica están complicados para buscar un reemplazante.
Según informa este jueves El Mercurio, poco margen es el que le queda al DT argentino. El próximo lunes se reunirá el directorio de Azul Azul para evaluar su trabajo y ya se filtró que varios directores tienen decidido su voto en contra de mantenerlo en la banca.
Pero Franco deberá pasar otra dura prueba antes de llegar a esa instancia, cuando se reúna con la Comisión de Fútbol de la concesionaria, pues trascendió que no se le permitirán excusas para explicar el magro desempeño de los azules en los dos frentes más importantes del semestre: la Copa Libertadores y el Torneo Nacional.
En el encuentro, que está anunciado para hoy, pero que se podría realizar mañana, Franco tendrá la oportunidad de hacer un mea culpa y de aceptar las nuevas condiciones que se le impondrán. "Hay cosas que queremos que cambien y si no está dispuesto, no sigue", señalan al interior de la comisión.
Las condiciones son extremas. De partida, los dirigentes de Universidad de Chile pretenden que el DT le informe con antelación a la Comisión de Fútbol las formaciones que usará y que les explique detalladamente las razones para citar o dejar de llamar jugadores.
Se espera una conversación franca y directa, la que podría adelantar la salida del técnico si no acepta el nuevo escenario. "Fue un semestre malo para la U, eso no se puede ocultar", dicen en la concesionaria.
En la reunión, además, se le dará a conocer de manera oficial la molestia del directorio por el nivel del equipo. Y solo dependiendo de la respuesta del trasandino, se citará a la reunión ampliada para definir su futuro. Para Azul Azul es un tema complicado, porque no hay reemplazo a la mano y recién comenzaron a trabajar en la búsqueda de un nuevo técnico.
Por eso hay un sector del directorio que apuesta a la estabilidad y mira diciembre como el plazo para traer a un DT de mayor calado.
La mayoría se inclinaría por cesar a Franco inmediatamente y corregir el rumbo antes de perder todo el año.
Si el DT acepta las nuevas condiciones y realiza la autocrítica que se le exige, sus posibilidades de tener una nueva oportunidad se incrementarían.