Arturo Salah tiene todo en su cabeza.
Marco Muga, El Mercurio
SANTIAGO.- A pesar de que aún no está claro el nombre del nuevo técnico, en Blanco y Negro saben que tan importante como el DT es cerrar la nómina de refuerzos para el segundo semestre.
Según El Mercurio, en la concesionaria ya avisan que el nuevo entrenador no tendrá manga ancha para las contrataciones. Estiman que los refuerzos no deberían pasar de cuatro hombres, a la luz de los últimos balances deficitarios. "Hay que tomar en cuenta la arista económica", dijo Salah.
Uno de ellos debe ser defensa, otro lateral izquierdo -en caso de que se decida terminar el contrato de Juan Guillermo Domínguez- y dos hombres más ofensivos. "La idea es que pueda trabajar este equipo, que le saque partido", insisten desde Macul.
El presidente de Blanco y Negro, Arturo Salah, les pidió a los integrantes del directorio de la compañía que tuvieran paciencia para la definición del nuevo entrenador. El timonel albo dijo que "ojalá solo tenga que hablar con uno" de sus candidatos.
Y si bien ha adelantado trabajo, entre los postulantes aparecen varios hombres que siguen en competencia por el torneo nacional. Por eso, la etapa de definiciones se iniciará la próxima semana, en torno a un puñado de candidatos: Jorge Pellicer, José Luis Sierra, Gustavo Benítez -quien vuelve mañana al país- y, quizás, Marco Antonio Figueroa y Claudio Borghi. "Arturo tiene el nombre en su cabeza, pero no ha querido revelarlo, ni siquiera al directorio", dictan en el Cacique.
El ungido por Salah no tendrá una tarea sencilla. Antes de que se reanude la competencia -el 3 de julio, con la Copa Chile- deberá establecer hasta una quincena de bajas. "Tener tantos jugadores es una situación anómala", dijo Salah en su presentación. Y la lista, a la luz de los pobres resultados de las últimas fechas, se ha ido engrosando.