PARÍS.- El español Rafael Nadal sufrió este viernes mucho más de lo imaginable antes de avanzar a la tercera ronda de Roland Garros, donde busca su octavo título.
Nadal, número cuatro del mundo, se impuso 4-6, 6-3, 6-3 y 6-2 al eslovaco Martin Klizan, 35 de la clasificación, y jugará mañana sábado con el italiano Fabio Fognini por un lugar en los octavos de final.
El choque entre Nadal y Klizan debió jugarse ayer, pero fue suspendido por lluvia en el momento preciso en que debía comenzar.
El español llegó hoy tenso y enojado aún por la suspensión, que le dio cierta ventaja a sus mayores rivales, el serbio Novak Djokovic y el suizo Roger Federer, cómodamente instalados en la tercera ronda desde el jueves y el miércoles, respectivamente.
El ambiente en el estadio Suzanne Lenglen -el segundo escenario en importancia en el complejo de Roland Garros- era frío, con pesadas nubes cubriendo el cielo y constante amenaza de lluvia.
Klizan, zurdo como Nadal y dueño también de un revés a dos manos, jugó sin complejos y arriesgando ante el español, que mostró una movilidad no siempre buena y falló mucho con la derecha.
Pero tras quebrar para 2-0 en el segundo parcial Nadal se liberó y subió su nivel para pasar a ser el dueño del partido, aunque Klizan siguiera inquietándolo con arriesgadas derechas planas y reveses cruzados.