Las protestas, que entran en su segunda semana, están centradas en los altos impuestos, la inflación, la corrupción y los servicios públicos deficientes.
EFERÍO DE JANEIRO.- La FIFA, ente rector del fútbol mundial, aseguró este viernes que no ha discutido la posibilidad de cancelar la Copa Confederaciones, torneo que se ha visto ensombrecido por unas masivas protestas en todo Brasil.
"Hasta la fecha, ni la FIFA ni el comité organizador local han discutido cualquier posibilidad de cancelar la Copa Confederaciones", afirmó el organismo.
La cadena de radio CBN y el sitio en internet del periódico Estado de Sao Paulo difundieron reportes en los que se especulaba que el torneo de ocho equipos, considerado un ensayo para el Mundial del próximo año, estaba en peligro.
"La FIFA pedirá una compensación a Brasil si la Copa Confederaciones debe ser suspendida", dijo un titular del sitio internet de CBN.
Aproximadamente un millón de personas salieron a las calles de todo Brasil el jueves, en una intensificación de las mayores protestas que vive el país en dos décadas pese a las concesiones del Gobierno para frenarlas.
Las protestas, que entran en su segunda semana, están centradas en los altos impuestos, la inflación, la corrupción y los servicios públicos deficientes y también van contra los 26.000 millones de dólares de dinero público que se van a gastar para albergar el Mundial y los Juegos Olímpicos de 2016.
Un reporte de CBN dijo que uno de los ocho equipos estaba presionando a sus dirigentes para abandonar la Copa Confederaciones porque estaban preocupados por los familiares que habían acudido a Brasil a seguir los partidos.
"Desde el punto de vista legal, hay un cierto grado de confianza por parte de la FIFA de que si se cancela el torneo, puede presentar un reclamo al Gobierno de Brasil, si no hay garantías de seguridad para la competencia o el Mundial", dijo el reporte de Juck Kfouri, un experimentado periodista deportivo brasileño.
"Existe una fuerte especulación, que no desaparecerá", añadió, en referencia a los rumores de que la competencia está en peligro.
Estado de Sao Paulo señaló que la FIFA estaba negociando con los equipos para convencerlos de que permanezcan en la competencia.
"Las protestas en las calles de las ciudades brasileñas han forzado a la FIFA a negociar con los equipos para que permanezcan en la Copa Confederaciones", indicó la publicación.
"Por ley, si no hay garantías de seguridad, podría forzar a la cancelación del torneo", agregó.
Estado de Sao Paulo dijo que dos vehículos de la FIFA fueron atacados en Salvador, donde Uruguay jugó contra Nigeria el miércoles, y que se había ordenado a los empleados que no llevaran uniformes afuera del hotel.
La FIFA confirmó el incidente, pero dijo que los vehículos, que terminaron con sus ventanas rotas, estaban vacíos y estacionados en una calle.