Javier Toledo, intentará dejar una huella en su paso por Colo Colo.
Colocolo.clSANTIAGO.- Gustavo Benítez estaba tras los pasos de un centrodelantero para reforzar a Colo Colo y finalmente Javier Toledo, atacante proveniente de Rosario Central, fue el escogido por el entrenador paraguayo.
Pero las estadísticas del argentino en su arribo a Macul no son del todo positivas, ya que el jugador registra sólo 16 goles en sus últimos tres años, una baja cifra que le valió las críticas de hinchas y de la prensa en su paso por el elenco que hoy dirige Miguel Ángel Russo.
Es que más allá de que el ariete marcó 10 de esos 16 tantos en el último torneo de la Primera B trasandina, su falta de eficacia frente al arco agotó la paciencia de muchos dejando un mal recuerdo en el país vecino.
Ni siquiera que anotara los tres goles a Gimasia y Esgrima de Jujuy, en el partido que sentenció el ascenso de su equipo, sirvió para ganarse a la hinchada "canalla".
La falta de precisión, y el gran número de opciones de marcar desperdiciadas (ver video), llevaron a que sus 10 goles pasaran a segundo plano y todo su análisis se enfocara en su poco poder de contundencia ante el pórtico rival.
Pese a que intentó convencer con sus principales características físicas, como que mide 1.85 metro, que su fuerte es el juego aéreo y que es un jugador que retrocede para buscar balones cuando no le llegan, nada resultó.
La imagen que dejó Toledo en el elenco "canalla" no fue de las mejores, por lo que una vez anunciada su contratación en el Cacique algunos hinchas del cuadro argentino incluso celebraron en las redes sociales su partida y agradecieron a los albos por su fichaje.
Pero ahora Toledo tiene la oportunidad de extender y mejorar la cifra que anotó en su última temporada en el cuadro de Russo, ya que el ariete llega a Colo Colo como el centrodelantero que necesitaba Benítez para reforzar la ofensiva.
En el Cacique, al delantero argentino tendrá la posibilidad de enterrar ese cuestionamiento con que llega tras dejar Rosario, de paso responder a la confianza del DT paraguayo y así también ganarse a la hinchada, una que no ha sido amable con él en los últimos años.