BUENOS AIRES.- Independiente, siete veces campeón de la Copa Libertadores y uno de los clubes más populares de Argentina, se vio sorprendido en su debut en la Primera B Nacional, al perder 2-1 como local con el modesto Brown de Adrogué.
En su estadio de Avellaneda, los 'Diablos Rojos' se vieron claramente superados por un equipo muy humilde, que recién este año ascendió a la segunda división del fútbol argentino, pero que se encargó de jugarle de igual a igual al conjunto dirigido por Miguel Brindisi, considerado como candidato para regresar rápidamente a primera.
Martín Fabro (15), curiosamente un jugador surgido en Independiente, y Matías Sproat (61) anotaron los goles para el triunfo de Brown de Adrogué; Daniel Montenegro (28, de penal) descontó para los 'Rojos'.
"Va a ser algo difícil", aceptó 'Rolfi' Montenegro, una de las figuras de Independiente, sobre la adaptación de su equipo a la segunda categoría, luego de una derrota estrepitosa.
Independiente, que renovó el plantel luego de protagonizar un histórico descenso, el primero de su centenaria y rica historia, jugó mal y se fue silbado por unos 25.000 hinchas hinchas, en lo que pareció una prolongación del calvario que lo llevó a caer a segunda hace pocos meses.
En cambio, Brown de Adrogué, club fundado en 1945 y que pasó varios años en las categorías más bajas, se dio el gusto más grande de su historia al vencer al séptuple campeón de la Libertadores.