SANTIAGO.- Una grave acusación realizaron desde Cobreloa tras confirmarse que no podrán jugar su encuentro ante Deportes Iquique en el estadio Municipal de Calama, y que preliminarmente estaba programado para el domingo 6 de octubre a las 16:00 horas en el recinto calameño.
"La idea nuestra era que se jugara en Calama el domingo, pero el campeonato se está manejando desde la ANFP", señaló a Emol el presidente de la comisión fútbol del cuadro loíno, Patricio Contreras.
Los dardos de la dirigencia del conjunto nortino apuntan directamente a la figura de Jorge Fistonic, ex vicepresidente de Iquique y hoy director del ente rector del fútbol chileno.
"Él no quería que jugáramos en nuestra cancha. No entendemos por qué se cambió la sede, se nos han hecho miles de reparos. Nos están pidiendo muchos requisitos siendo que hemos jugado en canchas que no tenían ni agua, por ejemplo en el Juan López de Antofagasta donde tuvimos que ir a bañarnos junto con los árbitros al hotel", acusa Contreras.
Ante esta negativa, el cuerpo técnico de Cobreloa se opone a adelantar el duelo para el sábado en el Bicentenario Calvo y Bascuñán y pedirán que el lance se dispute el lunes en el recinto antofagastino.
Pero los naranjas no sólo dicen verse afectados por esta decisión, sino que también por los cobros de los árbitros, en especial por Carlos Ulloa, quien el pasado fin de semana les sancionó dudosos penales en contra y expulsó a dos jugadores en el partido frente a Palestino que terminó con el invicto y que de paso les quitó la cima del Apertura 2013-2014.
"Nosotros presentamos una denuncia con videos elaborados por el cuerpo técnico donde se muestra que la expulsión de René Lima por una supuesta jugada brusca nunca fue violenta", señala Contreras.
Es más, el tema para ellos es más amplio y explican que "el fútbol en general se ha visto perjudicado, no solo nosotros. Iquique y Huachipato también han sido afectados por los malos arbitrajes".