Una generación que hace historia.
Marco Muga, El Mercurio
SANTIAGO.- Bravo, González, Medel, Isla, Mena, Díaz, Aránguiz, Vidal, Valdivia, Sánchez, Vargas... 11 apellidos que quedarán marcados en la poco decorativa historia del fútbol chileno. Este grupo de jugadores consiguió lo que nunca antes se había logrado. Chile, sí la "Roja", por primera vez en la historia clasifica en cancha a dos mundiales consecutivos.
Y varios de estos, incluso se repiten de aquel 10 de octubre de 2009, cuando en Colombia, ese equipo dirigido por Marcelo Bielsa regresaba a la seleccíón nacional a una cita planetaria después de 12 años.
Hoy, cuatro años y cuatro días después de aquella gesta, Chile vuelve a sacar pasajes para la máxima cita del balompié. Y ahora con el valor agregado de que los boletos se consiguieron en casa, ante un estadio Nacional repleto de público y con un deslumbrante tinte rojo.
Había especulaciones en lo que podía pasar este martes ante Ecuador. Un empate los clasificaba a ambos al Mundial. Pero este equipo de Sampaoli mostró que no está para atar marcadores. Desde el minuto uno salió a buscar la gloria, y con lo que sabe: Verticalidad, presión y táctica en velocidad.
No hubo para que mirar lo que pasaba en Montevideo entre Uruguay y Argentina. No había que sacar la calculadora, la "Roja" necesitaba de un triunfo y no falló.
Después de algunos titubeos iniciales, el camino comenzó a pavimentarse a los 34'. Otra vez, tal como en Colombia, estuvo inspirado Alexis Sánchez y abrió la ruta para la clasificación. El tocopillano recibió un centro desde la izquierda de parte de Eugenio Mena y saltó antes y más que los espigados zagueros visitantes. Cabezazo y a celebrar.
Era el primero, era el que reducía la incertidumbre. Pero había que buscar más tranquilidad. Y se consiguió otra vez después de un centro. Sánchez peina en el primer palo y en la boca del arco aparece Gary Medel para el 2-0 a los 37'. Se desató la fiesta.
Despertó el público, Chile comenzó a tocar más el balón y aunque tuvo el tercero no pudo sellar una posible goleada.
Ecuador, que cerca de los 20 minutos del primer tiempo tuvo complicado a Chile, quiso buscar un tanto para su propia tranquilidad y lo consiguió a los 66' vía Felipe Caicedo.
El tiempo parecía correr más lento. No llegaba el pitazo final, estaba ahogado el grito. Hasta que el brasileño Leandro Vuaden levantó sus brazos, pito a la boca y 16 millones se abrazan, mientras con lágrimas en los ojos en el pasto del Nacional los jugadores y cuerpo técnico no paraban de gritar: "Chile va al Mundial..."