Regresa a la titularidad.
ReutersMILAN.- El Barcelona visitará mañana al Milan con el objetivo de sumar un triunfo que lo consolide al frente del Grupo H de la Liga de Campeones y refuerce su moral para el clásico del sábado ante el Real Madrid.
Españoles e italianos medirán fuerzas en la lucha por el liderato de un cuadro que en estos momentos lidera el Barcelona con seis puntos, dos más que el Milan.
El Barcelona llegó a Italia muy motivado y con ganas de olvidar cuanto antes el empate sin goles cosechado el sábado ante Osasuna. Ese resultado quebró una racha de ocho triunfos consecutivos en la Liga española y mostró algunos defectos en el funcionamiento ofensivo del equipo de Gerardo Martino, especialmente en la primera parte.
Para proponer soluciones está el argentino Lionel Messi, recuperado de sus problemas musculares. Tuvo 20 minutos ante Osasuna y la incógnita es ver si Martino lo pone desde el inicio ante el Milan, como parece.
Lo acompañará Alexis Sánchez, quien descansó el sábado, pero regresaría al equipo estelar para este duelo en Italia. Es probable que se caiga del equipo el brasileño Neymar, a quien Martino podría dar descanso dentro de su innegociable política de rotaciones.
Más difícil es aventurar la composición de la línea defensiva, pues el Barcelona fue recuperando a todos sus efectivos. Gerard Piqué será titular porque no jugó ante Osasuna, al igual que Dani Alves, y la cuestión es ver quién será el otro central, con idénticas opciones para Carles Puyol, Javier Mascherano o Marc Bartra.
El Milan vive estos días pendiente de su atacante Mario Balotelli, quien tiene problemas musculares, y de cómo afrontará el duelo ante el Barcelona.
Su entrenador, Massimiliano Allegri, sugirió hoy que se verá un Milan atrevido: "No somos peor que Osasuna. Podemos jugar un partido valiente porque no estamos en un choque a eliminación directa"
El técnico italiano podría apostar por un "tridente" ofensivo compuesto por Alessandro Matri, Robinho y Valter Birsa. El brasileño Kaká quedaría en la reserva.
Será el reencuentro entre dos equipos que la pasada temporada ofrecieron una vibrante eliminatoria de octavos de final en la Liga de Campeones, en la que el Milan ganó la ida por 2-0 y el Barcelona remontó con un 4-0 inapelable.
Para el equipo de Martino, será la oportunidad de reforzar su liderato, recuperar el paso tras el tropiezo ante Osasuna y cargar su moral para la cita del sábado, en el caso de que gane.