SANTIAGO.- Martín Lasarte
asumió en junio del 2012 la banca de la Universidad Católica y hoy, un año y medio después, anunció que renuncia y que lo último que hará será dirigir los duelos del conjunto de la precordillera en la liguilla.
Con el uruguayo en la banca, la UC realizó grandes temporadas, pero ninguna coronada con un título. La desilusión más reciente es la del pasado martes cuando cayó en la final del Apertura ante O'Higgins. Y eso le pasó la cuenta.
El mismo presidente de la institución universitaria, Jaime Estévez, sostuvo en la conferencia de prensa dada hoy por el charrúa que "quiero agradecer a Martín por su entrega y trabajo. Lamentablemente hemos perdido 3 finales".
Y los hinchas no perdonan el no ganar coronas. El estratega fue víctima de ataques de parte de los aficionados. Al perder el certamen del primer semestre ya había sido encarado por un grupo de fanáticos en el aeropuerto de Arica, y el martes en el Nacional, también fue víctima de los reproches de los enfurecidos forofos.
En el tiempo que el técnico uruguayo estuvo al mando de los cruzados, sus logros más resaltantes son tres subcampeonatos, todos conseguidos en lo que va de este 2013.
En cuanto a números, y luego de siete torneos que ha dirigido el ex estratega de la Real Sociedad de España, registra un 63 por ciento de rendimiento gracias a 49 triunfos, 21 empates y sólo 19 derrotas.
Además, se va con el histórico registro de haber ganado los cuatro clásicos que jugó en torneos nacionales contra los archirrivales Colo Colo y la Universidad de Chile.
Pero todo comenzó mal para Lasarte. En el Clausura 2012 los universitarios
no lograron clasificar a los playoffs quedando fuera, en la novena posición. Sin embargo, ese mismo semestre los de la precordillera alcanzaron las
semifinales de la Copa Sudamericana, siendo eliminados por Sao Paulo luego de igualar los dos cotejos y solo por los goles convertidos como visita.
Este 2013 los objetivos eran muchos, y en todos la UC dijo presente en instancias decisivas. El primer torneo fue la Copa Chile 2012-2013, donde los cruzados defendían la corona obtenida en la edición anterior. Pero una vez más se quedaron sin nada luego de que la
Universidad de Chile los venciera en los descuentos en el lance definitivo disputado en Temuco.
A Católica le costó olvidarse de esa dolorosa caída, pero por delante tenían el Campeonato Nacional 2013. En este certamen fueron punteros por largas fechas, pero puntos perdidos como local mermaron sus opciones y tuvieron que ver como
Unión Española les arrebataba el título por diferencia de goles.
Ya en la segunda parte del año la UC volvió a tener una buena actuación en la Sudamericana. Sin embargo, una vez más los paulistas fueron los que los
dejaron en el camino despidiéndose en octavos de final, pero presentando una muy buena imagen.
Además, el cuadro de la precordillera aún se encuentra disputando la Copa Chile 2013-2014, certamen en el que ya está
clasificado a las semifinales y donde volverá a ver acción el próximo año.
Y el del martes, en la
derrota ante O'Higgins, fue uno de los golpes más duros. Durante gran parte del Apertura fueron sólidos y solitarios líderes, pero una caída en las últimas fechas ante Antofagasta permitió que los rancagüinos los alcanzaran.
En igualdad de condiciones llegaron a la final y la historia ya es conocida. Los de la VI Región dieron la primera vuelta olímpica en 58 años desde su fundación y dejaron a los cruzados una vez más con las manos vacías.
Llegó el momento del adiós del estratega charrúa, quien dejará la UC con un grato recuerdo de parte de sus dirigidos por el respetuoso trato y profesionalismo, pero con la gran deuda de no haber podido dar ninguna vuelta olímpica.
