Ramón Fernández abrió la ruta de la victoria azul con un golazo de tiro libre.
APSANTAIGO- Dejando de lado sus malas actuaciones en el Clausura y los cuatro partidos sin ganar que arrastraba, la Universidad de Chile no se espantó con la altura de Huancayo y consiguió un vital triunfo por 2-1 en un encuentro que tuvo un final de infarto con expulsados y con Cristián Romero agredido por hinchas locales.
En el comienzo del partido quedó clara la estrategia del local. Esperar en su propio terreno a la U para que los azules hicieran el desgaste y así sacarle provecho al asunto de la altura. La U tomó la iniciativa de buscar el gol, pero la rotación de la pelota fue extremadamente lenta.
El tema de la falta de velocidad en la U se sumó al extraño posicionamiento en cancha de los hombres en punta. Rodrigo Mora y Enzo Gutiérrez estaban muy lejos del área y demasiado abiertos para lo que es su posición natural, lo que hizo ver particularmente incómodo al uruguayo por sobre el argentino.
Sin hacer mucho mérito, Real Garcilaso supo ponerse en ventaja al aprovechar una contra que pilló mal parada a la U. Gran arrancada de Iván Santillán, el punto más alto del local, por el sector izquierdo, centro al corazón del área y Víctor Ferreira (36’) definió aprovechando que José Rojas no logró cubrir bien el espacio.
El golpe se lo sacó de inmediato la U, ya que a los 39’ Ramón Fernández sacó dividendos de una de las características más bulladas de la altura. Desde más de 35 metros el argentino disparó de tiro libre y su balonazo, que agarró mucha velocidad, se coló en el ángulo superior derecho del arquero Diego Carranza. Una joya con el sello del ex Estudiantes.
En la segunda etapa la U pareció sentirse más cómoda sobre la cancha de Huancayo. El siempre parejo nivel de Juan Rodrigo Rojas más la buena conducción de Gustavo Lorenzetti y Ramón Fernández empujaron a la U a cargar las acciones sobre el área rival, pero a diferencia del primer tiempo, en esta ocasión avisó con peligro.
A los 61’ Roberto Cereceda pudo convertir un golazo al rematar de media distancia, sin embargo Diego Carranza logró sacar con lo justo el disparo del zurdo que se colaba. Un minuto más tarde Enzo Gutiérrez tuvo otra clara cuando sacó un potente disparo de pierna izquierda, sin embargo su tiro fue al cuerpo del arquero local.
Pero el ex delantero de O’Higgins tendría su revancha a los 76’. Iba a ser modificado por Patricio Rubio, pero Cristián Romero decidió darle una jugada más: buscar el envío de córner de Ramón Fernández. La apuesta tuvo éxito, ya que Gutiérrez convirtió de cabeza tras centro del ex Unión La Calera, aprovechando también la mala marca rival.
Dicho gol reencontró al 9 azul con el gol después de casi un año y medio sin convertir. El último gol que registraba Enzo data del 26 de octubre de 2012 cuando anotó el exclusivo gol de la U en la victoria sobre Emelec por Copa Sudamericana.
El final del cotejo sería de infarto. Luis Marín sacó un tiro libre del ángulo a los 90’ del paraguayo Ramón Rodríguez. Un minuto más tarde Gustavo Lorenzetti perdió un balón en la salida, lo que provocó que Igor Lichnovsky utilizara el último recurso de la falta para frenar a Anderson Cueto que se iba sólo frente al arco azul. Expulsado el zaguero y de paso roja para Víctor Ferreira por reclamos.
En la última jugada Anderson Cueto sacó un balón lleno de efecto de tiro libre sobre el cual Marín hizo vista. El balón pasó a centímetros del palo derecho y una vez fuera de la cancha el juez Wilmar Roldán decretó el término del encuentro, el que no pudo significar alegría inmediata para Cristián Romero, pues cuando el DT levantaba los brazos para celebrar recibió un proyectil desde la tribuna.
Con este vibrante triunfo, la U suma seis unidades en el grupo 5 de la Libertadores y queda en el segundo lugar tras Defensor Sporting, que ostenta las mismos puntos, pero muestra mejor diferencia de gol: +4 para los uruguayos ante -2 de la U.
Cruzeiro quedó tercero con 3 puntos y diferencia +1, mientras que Garcilaso cierra la clasificación con 3 unidades y -3 de diferencia.