''Nole'' levanta los brazos tras materializar una trabajada victoria.
AFPINDIAN WELLS.- El serbio Novak Djokovic borró el fantasma de la semifinal de 2012 frente al estadounidense John Isner y esta vez logró la victoria, no sin dificultades, por 7-5, 6-7(2) y 6-1 en dos horas y 23 minutos, de forma que se verá las caras con Roger Federer en la final de mañana.
Djokovic, en busca de su primer campeonato de la temporada, tratará de alzarse con su tercer título en Indian Wells tras las victorias conseguidas en las ediciones de 2008 y 2011.
El número dos del mundo, que cayó eliminado en semifinales los últimos dos años en el torneo del Valle de Coachella, ha batido en las rondas anteriores a Julien Benneteau, Marin Cilic, Alejandro González y Victor Hanescu.
El primer set vio un choque de trenes, un duelo entre fuerzas de la naturaleza con enorme confianza y destreza en el saque. Si Djokovic dispuso de tres bolas de "break" con 1-1, salvadas todas ellas por su rival mediante su cañón, al estadounidense le tocó sufrir el mismo destino cuando tuvo dos bolas de set con 5-4 a favor.
El serbio levantó ambas rehaciéndose de forma implacable y lo que pudo significar la primera manga para el gigante, pasó a estar en manos del número dos del mundo tras concretar la rotura de saque. Con su servicio no perdonó y se agenció el set exhibiendo una gran solidez -hasta 4 puntos de saque directo por 2 de su rival-.
A Isner le mataban los 15 errores no forzados cometidos hasta el momento.
En la segunda manga Isner, a pesar de sus molestias en la pierna izquierda, volvió a ser él mismo apoyándose en varios puntos de saque directo, pero la incertidumbre volvió a romperse con un nuevo "break" obra de Djokovic que le dio el 5-4 con saque a favor.
Ahí comenzó una batalla campal con tres roturas consecutivas que llevó el set a la muerte súbita, donde Isner dominó de forma abrumadora.
Aunque el de Belgrado se desesperaba por no poder despegarse de su rival y llegó a tirar la raqueta contra el suelo con rabia, finalmente logró respirar con 3-1 en el tercer set imponiendo su mayor versatilidad y repertorio de golpes. Isner, agotado y renqueante, no ofrecía mayor resistencia y entregó el choque ante un crecido Djokovic.
Se trataba de la reedición de la semifinal de 2012, en la que Isner se impuso para caer derrotado posteriormente en la final frente a Federer.
Isner buscaba hoy su tercera final en un Masters 1000 y la número 18 de su carrera, 14 de ellas disputadas en suelo estadounidense.
Ambos tenistas se habían enfrentado en seis ocasiones, con cuatro victorias previas para el serbio, la última de ellas en el Masters 1000 de París (2013).