Nibali se encamina a ganar la última ''grande'' que le falta, el Tour de Francia. Antes ya ganó la Vuelta a España y el Giro de Italia.
EFECHAMROUSSE, Francia.- El italiano Vincenzo Nibali se impuso hoy en la decimotercera etapa del Tour de Francia, con meta en la estación de esquí de Chamrousse, el primer final de alta montaña de esta edición, y consolidó su liderato en la clasificación general.
El ciclista siciliano del equipo kazajo Astana agrandó la ventaja con sus rivales. El principal de ellos, el australiano Richie Porte, del Sky, sufrió un desfallecimiento en el ascenso al puerto final y dijo adiós a sus opciones de victoria al llegar a 8:48 minutos del vencedor.
Nibali dio un golpe de efecto casi definitivo al Tour. Respondió al ataque de Alejandro Valverde en las rampas de Chamrousse a falta de 10 kilómetros para el final y, cuando quedaban 6, dejó plantado al ciclista del Movistar y al francés Thibaut Pinot (FdJ), el único que estaba con los mejores.
El italiano del Astana alcanzó a dos fugados, el polaco Rafal Majka (Tinkoff) y al checo Leopold Koning (Netapp), con quienes rodó unos kilómetros, hasta que a falta de tres se marchó solo a buscar su cuarta victoria de la temporada y la trigésimo tercera de su carrera.
Nibali empleó 5:12:29 en el tramo de 1976,5 kilómetros, superando por 10 segundo al polaco Majka y por 11 al austriaco König.
A continuación llegó otro favorito que vio cómo Nibali imprimió un ritmo que no pudo seguir, Valverde, quien de todas maneras pasó a ocupar el segundo puesto en la general, a 3:37 del italiano.
La victoria también le valió a Nibali desplazar al español Joaquim "Purito" Rodríguez (Katusha) del primer puesto de la clasificación de la montaña.
Otro puerto en los Alpes
Este sábado se disputará el segundo capítulo alpino del Tour, que tendrá como principal aliciente el ascenso al Izoard, de categoría especial, y la meta situada en el Risoul, de primera.
La etapa cuenta en total con dos puertos de primera y el Izoard, una travesía por los Alpes poco habitual, que se produce con muchos kilómetros en las piernas de los ciclistas y tras haber abordado la llegada a Chamrousse.
Se trata de un lugar ideal para lanzar un ataque largo entre los favoritos para la general, que concluirá cuando el pelotón se plante en Briançon para comenzar a subir el durísimo Izoard, con sus 19 kilómetros al 6 %.