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Santiago: Sábado 05 de octubre del 2024 | Actualizado 23:06
Nibali en medio del pelotón, atento a todos los detalles para que no se le escape el maillot amarillo.
AFPNIMES, Francia.- El italiano Vincenzo Nibali, líder del Tour de Francia, vivió este domingo una jornada sin problemas en la ronda gala, pero aseguró que en la carrera "no hay días tranquilos".
"No recuerdo ninguna etapa tranquila en el Tour, siempre pasa algo, hay nerviosismo y hay que estar muy atento", dijo el ciclista del Astana, que señaló que se vio obligado a estar en la parte alta del pelotón para evitar los posibles abanicos cuando soplaba el viento de costado.
Nibali señaló que cada día está "totalmente concentrado" porque su "experiencia en las grandes vueltas demuestra que cada segundo cuenta al final".
El italiano aseguró que pese a la dureza de la competición no ha tenido días malos en este Tour.
"Las jornadas han pasado bien, mi equipo ha trabajado bien, no he tenido ningún día malo, he estado en buena forma", comentó.
Además de la dureza de las tres etapas pirenaicas que seguirán a la jornada de reposo de mañana, Nibali aseguró temer a la contrarreloj de la víspera del último día, de 54 kilómetros.
"En estos tres últimos años he trabajado mucho la contrarreloj, he mejorado mucho mi posición en la bicicleta y he entrenado mucho en pista. El año pasado en el Giro la contrarreloj fue importante, no tenía que perder mucho tiempo. Hace dos años en el Tour perdí mucho tiempo y sabía que tenía que mejorar en ese apartado", dijo.
Valverde y Bardet van por el podio
Alejandro Valverde (Movistar) dijo hoy que "ahora" firmaría "terminar segundo", pero que no descarta mejorar, ya que, aunque Nibali "es el más fuerte, queda mucho Tour".
Respecto a la jornada con final a Nimes (triunfo del noruego Kristoff), Valverde hizo su resumen: "Es imposible tener un día tranquilo en el Tour. Pensábamos en un día tranquilo, pero ha sido muy duro, se ha disputado a tope. Además ha habido mucha tensión por la lluvia, el aire, había respeto por los abanicos... muy duro, la verdad".
En los Pirineos, Valverde tendrá que enfrentarse de nuevo a sus rivales directos, los franceses Bardet y Pinot y el estadounidense Van Garderen.
"Ante los Pirineos estoy bien, me encuentro recuperado y el descanso de mañana me vendrá muy bien. Vamos a ver qué sucede, pero todos los rivales están cerca, dan un poco de miedo", concluyó.
El francés Bardet, en tanto aseguró hoy que la renta que tiene ahora no es suficiente para subir al podio de París, por lo que anunció ataques en los Pirineos.
"Con ciclistas como (Tejay) Van Garderen necesito por lo menos dos o tres minutos para afrontar la contrarreloj", indicó el joven ciclista del AG2R, de 23 años.
Abanderado de la joven generación ascendente del ciclismo francés, Bardet afirmó sentirse "muy cómodo" en el papel de líder de su equipo, algo que le sucede por primera vez en el Tour, carrera que corre por segundo año consecutivo tras haber sido el anterior el mejor galo de la general.
"No hay que caer en la euforia. Si me hubieran dicho hace un tiempo que afrontaría la última semana del Tour en tercera posición no me lo habría creído, pero en el Tour lo que ganas en muchos días lo puedes perder en uno", indicó.
Respecto a lo que viene, Bardet señaló que "las tres etapas pirenaicas permiten cosas y nosotros tenemos dos hombres bien situados en la general (Jean-Christophe Peraud es sexto), por lo que hay margen para hacer alguna estrategia".
