El líder demócrata liberal dijo al Sunday Times que Rusia no debería albergar la competición después de que los separatistas prorrusos fuesen acusados por las naciones occidentales de derribar el avión en el este de Ucrania el 17 de julio, donde murieron 298 personas.
A principios de esta semana, algunos políticos alemanes dijeron que se debería quitar el Mundial a Rusia, mientras que la FIFA rechazó estos sentimientos diciendo que celebrar esta competición debería ser una "fuerza para el bien".
Casi 200 ciudadanos holandeses perdieron la vida en el siniestro y la federación de fútbol holandesa se reuniría a su debido tiempo para decidir si participa en la fase de clasificación para la fase final en Rusia.
Clegg dijo al periódico británico, que ha publicado recientemente una serie de artículos sobre la corrupción en torno a la concesión del Mundial 2022 a Catar, que amenazar a Rusia con quitarle el Mundial sería "una sanción política y simbólica muy potente".
"Si hay algo de lo que (el presidente) Vladimir Putin se preocupa, por lo que puedo ver, es su sentido de estatus", dijo.
"Quizás recordándole que no puedes mantener el mismo estatus en el mundo si ignoras al resto del mundo, quizá tendrá algún efecto en su forma de pensar".
Clegg dijo que los líderes mundiales parecerían "débiles y mentirosos", si se permitiera a Rusia celebrar el Mundial.
"El propio Vladimir Putin tiene que entender que no puede tener su tarta y comérsela", dijo Clegg.
"No puede presionar constantemente la paciencia de la comunidad internacional más allá de sus límites, desestabilizar un país vecino, proteger a esos separatistas armados en el este de Ucrania y todavía tener el privilegio y el honor de recibir en 2018 los elogios de ser el anfitrión del Mundial de fútbol".
Añadió: "No puedes tener esto, el deporte rey empañado por la fea agresión de Rusia en la frontera con Ucrania".
En un comunicado enviado el viernes, la FIFA dijo: "Lamentamos cualquier forma de violencia y continuaremos usando los torneos para promocionar el diálogo, el entendimiento y la paz entre los pueblos".
"Hemos visto que el Mundial de la FIFA puede ser una fuente de bien y la FIFA cree que ese será el caso del Mundial de 2018 en Rusia".
Clegg también dijo que Rusia no debía albergar un Gran Premio de Fórmula Uno en octubre pero el jefe de la competición, Bernie Ecclestone, ha declarado que seguirán adelante como estaba previsto.